MEET AGAIN 𝒇𝒕. so mun

017. Después de este dia

El corazón de Jae-won no dejaba de latir a toda fuerza, al igual sus mejillas seguían de un color rojo leve, aún cuando se fue del gimnasio dejando a Mun ahí.

Su corazón no dejaba de latir, pero eso no lo hacía malo. Aún cuando días atrás se quejaba por el latir fuerte de su corazón cuando estaba cerca de Mun, ahora era una sensación más cálida y linda de la cual disfrutaba.

Pero tantas emociones juntas lo obligaron a salir del gimnasio para fumarse un cigarrillo. Tenía que de, alguna forma, relajarse o no pensaría de manera cuerda. Además del momento incómodo que pasó con el señor Ga ahí. De solo recordarlo le daba risa.

Después de su beso incondicional, Jae-won tomó la mano de Mun, viendo como esta estaba herida. Y pues claro, él había ido con Mun para curarle la herida, pero hubo ese pequeño percance.

— Ven, te podré pomada en la herida de tu mano.

Mun no dijo nada, solo se dejó llevar por su mayor. Parecía que el adolescente aún no reaccionaba, aún están en las nubes, la sensación del beso que se dieron aún estaba en sus labios, lo que lo tenía atontado.

Se sentaron en el suelo, y con ayuda del hisopo Jae-won colocó pomada para evitar que se infectara. Un ruido detrás de ellos hizo que se girara, y ahí estaba, el señor Ga detrás de un peldaño escondiéndose pero era notable que estaba ahí. Jae-won nego con la cabeza y continuó colocando la pomada en lo que Mo-tak se acercaba con curiosidad.

— Solías alejar a la gente solo por tocarte. — Mo-tak camino de un lado a otro al rededor de Jae-won. —  ¿Qué ocurre?

— ¿Esto? — Jae-won señaló la mano de Mun, pero entendió que Mo-tak solo estaba jugando con él. — Lo estás haciendo de nuevo. Ya estoy harto. — se colocó de pie dejando todo ahí.

Mo-tak empezó a empujarlo con diversión.  El señor Ga ya tenía varios días burlándose y diciendo de cosas sobre ambos chicos. Claro, al principio era molesto para Jae-won que hiciera eso, pero en ese momento ya no lo era tanto. Pero aún tenía que fingir, no era momento de hablar sobre la relación de ambos chicos.

— El amor prevalece hasta en la guerra. Por su puesto. — continuó el hombre con bastante diversión.

— Deja de jugar a Cupido. Harás que todo sea incómodo. — Mun le dio mirada ladeaba la cabeza mientras Jae-won caminaba a la salida.

— ¿Por qué te vas así?

— ¡Tengo que ayudar con el desayuno! ¿Feliz?

El señor Ga rió con diversión mientras Jae-won miraba a Mun. Le guiño el ojo mientras sonreía. Mun se sonrojo al máximo y solo miró como Jae-won se iba.

   

Volvió a reír al recordarlo de nuevo.

Ya con el cigarrillo entre sus labios, miró al cielo. Estaba confundido, pero no por sus sentimientos a Mun, confundido de si esto estaba bien, si era correcto. Se estaba dando una oportunidad, pero no sabía si lo estaba haciendo bien, tenía miedo de arruinarlo, arruinar la única oportunidad que se le había dado.

Solo quería hacer las cosas bien y eso lo estaba matando, porque no sabía como hacerlo.

— Aquí estás.

Jae-won soltó el humo del cigarrillo mientras giraba su cabeza para mirar a la chica. Ha-na se sentó a su lado mientras soltaba un gran suspiro que llamó mucho la atención de Jae-won.

— ¿Sucede algo?

— No sabía que fumabas. — la chica lo miró.

— Si bueno, trato de no fumar con personas cerca. — el chico apago el cigarro con el reposa brazos de la banca donde estaban sentados. — Seguro la señora Choo me mataría si me viera fumando.