we are jaune ❀ yeongyu

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En el área educativa se encontraba Heeseung, después de tres años trabajando en dos diferentes guarderías fue reclutado para ser llevado allí junto a otras maestras. El rubio amaba su profesión, así como respetaba a los niños que tenía frente a él; un pequeño grupo de doce pequeños que lo veían expectantes a espera de sus indicaciones.

Heeseung tenía planeado que los pequeños conocieran ese día la importancia de expresar cómo se sentían, por ello tenía preparado a su equipo.

ㅡBuenos días pequeños, mi nombre es Heeseung, soy su guía en el área de destreza y aprendizaje, conmigo van a conocer muchísimas cosas y será muy divertido ¿están listos para comenzar esta aventura?

Diez de los presentes se quedaron en silencio con sus ojitos bien abiertos tratando de entender las palabras del adulto, solo un pequeño azabache levantó su manita para hacer una pregunta. El rubio le llamó su atención a la espera de la pregunta.

ㅡ¿Cómo te llamas?

En ese momento el rubio apretó sus labios en una línea recta, repitiéndose que definitivamente esto siempre sucedía y tenía que explicarlo de una forma sencilla que los menores fueran capaces de comprender.

ㅡYo soy Heeseung, seré su guía en esta divertida aventura de aprendizaje.

Con esas palabras los otros niños se animaron aún más para aplaudir y hacer un pequeño bullicio alegre que motivó al adulto. Entonces llamó a su equipo para comenzar con una reconocida canción de introducción, los cuatro adultos vestían de un solo color y tenían una forma geométrica en sus camisetas, además de que en sus rostros tenían stickers que llamaron la atención de los menores.

Fue entonces como la mañana comenzó haciendo un gracioso tren que venía e iba cantando alegremente la canción del abecedario, entre uno de los vagones de la estrella se encontraba Tae, él había hecho la pregunta y ahora era un vagoncito que reconocía las letras en las estaciones que los cuidadores se encargaban de hacer.

Ese día su mejor amigo estaba siendo distante debido a que el castañito tuvo una cita con su doctor o bien, con el psicólogo. Soobin recurría a estas citas cada cierto tiempo debido a la violencia física y emocional que recibió en su casa a una corta edad por parte de su progenitor, dejándole marcas profundas que necesitaban atención.

En su momento indicado Tae también tendría que asistir.

ㅡ¡Muy bien pequeños! Ahora vamos a conocer a las emocionesㅡ El rubio le dio la bienvenida a su equipo, cada uno presentándose acorde a su papel.

Jungwon era un cuadrado azul que representaba la tristeza porque había perdido a su peluche favorito, Jay era un círculo rojo que representaba el enojo porque su dibujo no había quedado como quería, Jiwoong era un triangulo amarillo que representaba la alegría al comer su postre preferido, Sunghoon era una estrella verde que se sentía tímido ante muchas personas y finalmente Heeseung era un corazón púrpura que se sentía emocionado por las personas que estaban frente a él.

Las emociones principales dieron un paso adelante y les preguntaron a todos los niños en qué momento sentían tristeza, enojo y alegría.

Una niña de seis años fue la primera en responder.

ㅡYo me siento triste cuando me hablan muy fuerte.

Le siguió otra pequeña de cinco.

ㅡA mi no me gusta prestar mis juguetes, me enojo cuando otros lo usan.

ㅡYo soy feliz cuando llega la hora del postre.

Entre esas y muchas más respuestas se creó un círculo de emociones, donde todos los niños comenzaron a compartir las propias, los representantes de cada una siempre respondían dándoles soluciones para llevarlas a cabo y que no las detuvieran, así como validaban cada situación por más insignificante que pareciera. El mundo de un infante podría desmoronarse con un juguete roto, así de simple, los problemas del mundo adulto aún eran complicados para ellos y por eso merecían ser comprendidos en sus primeras etapas, lo que el círculo de emociones daba a entender.