INDOMABLE

-3-

Jimin se desplomó sobre la cama y Dominique junto a él.

—No puedo creer que Jackson haya hecho eso... no puedo creerlo. ¿Sabes?— Dijo sentándose y cruzando las piernas.

—Creo que él solo quería atormentarme la vida, sabe cómo odio este lugar y a mi hermano.

—Jimin—Dijo Dominique un poco preocupada.—Debo volver, nuestro vuelo sale en la tarde de mañana, yo no puedo quedarme.

Jimin respiro profundo, —lo sé.

—Tengo hasta mañana para dar una respuesta, pero ... ¿Qué más puedo hacer Dominique? No puedo dejar que sacrifiquen a Star.

Jimin se volvió a tirar sobre su espalda, frustrado, tapando sus ojos con su antebrazo.

Un golpe se escuchó fuera de la habitación y Yoongi ingreso hecho una furia.

— ¿Qué acuerdo tenías con mi padre Jimin? ¿Por qué te dejo la Hacienda?

Dominique se puso de pie, era mejor dejar solos a ese par, aunque desconfiaba de que no se sacarían los ojos — los dejo solos.

Jimin asintió con la cabeza, mientras se levantaba e iba al baño.

No quería escuchar estupideces de su hermano

—Mírame Jimin—este solo lo ignoro

Yoongi lo tomo del brazo y lo azoto. Jimin se dio media vuelta y le dio un golpe en la quijada — no me toques.

Yoongi se tomó la mandíbula, —que mierda Jimin—no me toques— volvió a advertir.

No sé qué piensas, pero no tenía idea de las estupideces que pensaba Jackson. Yo no quería esto. No quería siquiera estar aquí.

Si fuera por mí, te regalo todo, no lo quiero. Me importa una mierda la Hacienda. Pero no puedo dejar que sacrifiquen a Star. Él lo sabía, malditamente lo sabía.

Ahora vete, sal de mi pieza, Jimin se enderezó y lo miro a los ojos _ Sal de mi casa Yoongi.

Yoongi casi se quedó sin respiración ante eso.

—No puedes echarme de esta casa, es mía —grito Yoongi

—¡No, ya no lo es!

—Entonces te quedarás— le dijo Yoongi tomando su cintura debajo de su chaqueta.

—¡No fui claro!, no puedo dejar que sacrifiquen a Star.

—¡Maldito caballo!, ¡maldito sea mi padre!, ¡maldito seas Park Jimin!

—¡No te basta con todo lo que te dejo!

Yoongi lo miro, una mirada oscura que pocas veces había visto en él —no, no me basta, yo lo quiero todo.

Jimin ladeo la cabeza, una punzada en su estómago y un mal presentimiento se alojó en sus pensamientos.

Yoongi bufo y se fue golpeando la puerta.

Jimin grito frustrado y se metió a la ducha. Odiaba todo en esta situación, odiaba tener que pensar.

Salió del baño con la toalla en la cintura. Se secó el cabello mientras buscaba ropa decente en su maleta.

El pensamiento se dirigió a su empresa, a todo lo que había logrado solo hasta hoy.

¿Qué haría con todos sus logros, con todo lo que había construido, con tanto esfuerzo y dedicación?

Tenía una empresa basada en amor. Fue tan feliz cuando se tituló.

Había conseguido tres trabajos y un cuarto de cuatro por cuatro. Su vida fue precaria y logro estudiar y fue uno de los mejores.