Donde el poseedor de unos grandes ojitos de Bambi llegó a la vida de Yeonjun y Beomgyu para ganarse su corazón y así crear un bonito color: el amarillo.
❝El color favorito de todo lo contradictorio, o del optimismo al igual que de los celos. Es el...
ㅡMuy bonito, ahora vamos por la tarjeta de crédito de JunJun.
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Beomgyu llevaba de la mano a Tae, ambos caminando entre los distintos locales de ropa infantil que aquella zona tenía, buscando algo agradable a ojos del menor y accesible para el peligris. Algunas personas pasaban y le daban una mirada a la tierna imagen que proyectaban.
Finalmente se detuvieron en un local conocido, al menos para el adulto que había ido ya antes allí. Cuando entraron la mujer de mediana edad que estaba en la caja bajó sus lentes para poder ver bien al peligris, su tono sorpresivo de voz no pasó desapercibido.
ㅡ¿Park Beomgyu?
ㅡBuenas tarde señora Shin, es un placer volver a verla.
ㅡPuedo decir lo mismo, ¿qué te trae por aquí? Tenía meses de no verte.
Una sonrisa salió de sus labios, mostrando después al pequeño cuerpo que miraba atento a la mujer, sus ojos brillantes y curiosos ㅡ¿Recuerdas el saludo que te enseñé Tae? Por favor, hazlo.
Tae asintió e hizo una pequeña reverencia ㅡBu-buen ta...de.
La anciana llevó sus manos a su pecho donde estaba su corazón ㅡ¡Pero que niño tan lindo! Tan respetuoso, ojalá mi nieto fuera así ㅡ Se lamentó ㅡEn fin, suponiendo que vienes a comprarle ropa te recomiendo los últimos pasillos, acabamos de acomodar esta mañana y hay diversidad de colores, diseños y tallas.
ㅡIremos ahí entonces, con permiso señora Shin.
ㅡAdelante.
Con pasos pequeños ambos caminaron hacia el pasillo que les indicaron, encontrando como había dicho la señora Shin diversidad de ropa. Tae casi se iba de espaldas al ver los grandes estantes.
¡Era como la ropa que usaban los niños que veía cuando estaba en la calle!
ㅡVen Tae, aquí está tu tallaㅡ El menor volteó hacia donde estaba Bomi y corrió hacia él, viendo la ropa que se le ponía sobre el overol, habían muchos colores con dibujos y otros simples. También pantalones, calcetines y zapatos.
Los zapatos eran los favoritos de Tae, porque cuando los usaba sus pies ya no dolían y podía caminar mucho más rápido.
ㅡLas botas se te ven bien así que te llevaré dos pares, y ¡Mira Tae!ㅡ Beomgyu tenía en sus manos una pantuflas de ardillita, eran de color rosa. Recordó que él y YoonGi tenían pantuflas similares con diferente animalito, si los llevaba podrían quedar a juego. ㅡSí, me los voy a llevar.
Durante un buen rato estuvieron probando distintos conjuntos, Tae hasta había señalado un vestido que le llamó la atención pero no le quedó por ser para bebés.
La canasta que llevaban ya estaba llena y Tae se veía feliz con su ropa nueva.