Capítulo 11: Tambaleante

Beginne am Anfang
                                    

Afronta las consecuencias, Max.

"No estoy aquí para regañarte, Max," Dijo la señora Grant. "Puede que esto sea... inapropiado para que un maestro le diga a un alumno, pero de cierto modo me hace feliz ver qué tienes a alguien en tu vida dispuesto a..." Ella hizo un gesto hacia su cuello. "Hacer eso. Estaba preocupada de que te mantuvieras encerrada en tu cabeza, sin interactuar con nadie."

Siento que esto....debería ser una conversación incómoda, pero la señora Grant es tan genial.

"Sí," Max se sonrojó. "Yo, eh, tuve mucha suerte."

"Ah, la juventud," Dijo la Sra. Grant con voz cantarina, girando su cuerpo caprichosamente. "Las cosas van sido algo difíciles últimamente. A una vieja como yo le hace sentirse bien ver a sus alumnos hacerlo lo mejor que pueden." Se puso seria por un momento. "¿Cómo lo llevas, Max?"

"Estoy...bien, señora Grant. Solo es algo difícil entenderlo todo." Honestidad sin ser tan honesta.

"Bueno, siempre estaré aquí si necesitas hablar," Dijo ella, viendo por encima del hombro de Max. "Te veré mañana en clases, ¿De acuerdo? Ahora, si me disculas..." Saltó alrededor de Max y se dirigió hacia una pareja besándose en un rincón, agitando los brazos. Max se rió entre dientes y sacudió la cabeza.

La señora Grant parece ser una adulta a la que puedo acudir... pero, pensaré en eso...

Max dió la vuelta, su respiración atrapada en sus pulmones. Miró la puerta del cuarto de arte, sintiendo una presencia amenazadora arrastrarse por su mente.

Es solo un cuarto, es solo un cuarto, es solo un cuarto.

Su visión se torció, imaginando sombras y flashes de cámaras bailando detrás del vidrio empañado de la puerta. Su respiración se aceleró mientras se apretaba el pecho, sintiendo una presión conocida en su cabeza. Su teléfono sonó, treyendola de vuelta a la realidad. Arrancando sus ojos de la puerta, comenzó a caminar por el pasillo, sacando su teléfono para examinar el mensaje.

Warren: Maaaaaxx ¿Estás libre? Estoy en mi cuarto.

Max sonrió, agradecida por el usual tiempo perfecto de Warren. Respondió mirando al frente de vez en cuándo para asegurarse de no chocar con nadie.

Max: ¡Sí! Voy contigo.

"¡Oye, tú nariz está sangrando!" Alguien le gritó después de que ella saliera rápidamente del edificio.

-----

Max llamó a la puerta de Warren, examinando la pizarra de al lado. Era un retrato bastante pobre  de Bill Nye, una cabeza sin cuerpo flotando sobre una pajarita de puntos. Debajo estaba escrito con grandes letras '¡Bill! ¡Bill! ¡Bill! ¡Bill!' Max rió al ver eso.

Vaya tonto.

La puerta se abrió, Warren sonreía con emoción. Max no había notado en el funeral de Rachel que tan raro fue verlo sin ningún moretón en su rostro. Ella le regresó la sonrisa.

"¡Max!" Dijo el, extendiendo sus brazos. La mente de Max pasó a cámara lenta, sus pensamientos procesaron que en realidad el le iba a dar un abrazo. En una rápida reflexión, se sintió un poco mal por todas las veces que ignoraba sin pensar sus avances, amistosos o no.

OuroborosWo Geschichten leben. Entdecke jetzt