⭑ "Como hacer enojar a un Rosier. By: Draco Malfoy"⭒

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Amelie por otro lado, ya conocía la mayoría de las posiciones que Snape les enseñaba, ella podría agradecerle a su madre por aquello. Adhara tenía una pequeña obsesión por las pociones con magia oscura aunque no era muy buena manejándolas, le gustaba descubrir nuevas cosas y en ocasiones era cruel por experimentar con animales pequeños que no tenían la culpa de nada.

Amelie solía darse la vuelta en sus lecciones cuando ella traiga consigo algún conejo o ratón y lo obligaba a tomar una posición de la cual no conocía sus terribles secuelas.

Su madre por supuesto la obligaba a mirar, para que anotara los efectos que ocasionaban en el animal,
era una manera horrible de empezar su día, aún mas cuando su corazón era demasiado blando para tanta crueldad.  Por eso en algunas ocasiones entraba en el sótano solitario de su madre para sacar a tantos animales como le fuera posible, al final su padre terminaba culpándose por ella, evitando así que recibiera un castigo mucho peor.

Laurent Rosier sabía cómo mentir de la manera correcta, era lo que mejor se le daba, según sus recuerdos.
Al igual que fingir que nada malo pasaba en su hogar, ni a su hija.

Pero Amelie no pensaría en eso por ahora. Dejo que el sueño la abraza, al menos por un rato.

Draco se acercó a al asiento en su otro lado acomodando su silla para que estuviera cerca de la chica durmiente, Theo inmediatamente le dio un manotazo en la mano cuando intento acariciar el cabello pelinegro de Amelie.

"Maten tus manos lejos, Malfoy" murmuro con recelo.

Draco bufo molesto antes de ignorarlo para acomodarse en su lugar.

En la puerta del aula apareció el trío de oro, aunque Hermione estaba separada de ellos como siempre, o al menos de Ron, el pelirrojo seguía con su resentimiento y por ahora no había nada que hacer para que lo olvidara.

Hermione se acercó al otro lado del salón, justo enfrente de la mesa de Amelie, quien estaba en un profundo sueño.
En cuando la vio sonrió levemente por la manera en que la niña parecía aferrarse a su libro como si estuviera tratando de abrazar a su osito de peluche, del cual ella sabía su existencia porque la niña se lo mencionó sin querer.

Le pareció algo realmente lindo, pero un poco extraño, no porque fuera malo si no porque no esperaba que ella tendiendo una imagen tan tosca, que infundía respeto tuviera esa clase de hábito.

Hermione acomodó su libro de pociones con torpeza, sus ojos aún puestos en la niña, se recostó en la mesa para tener más comodidad sin quietarle los ojos de encima, aunque aveces fingía leer su libro debajo de ella cuando Theodore Nott levanta la vista de su propio cuaderno para mirarla con las cejas alzadas cuando veía la manera en que sus ojos estaba pegados en su amiga.

El profesor Snape hizo su maravillosa aparición, ondeando su capa de un lado a otro como si estuviera desfilando en una pasarela. Amelie siempre solía sonreír con burla cuando lo veía pasar.

Severus se colocó enfrente de la clase entera, quienes guardaban silencio esperando a que él hablara primero, sobre todo los Gryffindor, los cuales siempre perdían puntos con el profesor dé pociones hasta por respirar, mismos que Harry Potter recuperaba por acciones similares.

El llevó su vista hasta todos los estudiantes mirándolos con cara aburrida, hasta su su vista pasó al grupo de serpientes quienes estaba tratando inútilmente despierta a su amiga.
Amelie estaba en sueño demasiado profundo.

"WONDERWALL; Hermione Granger"Where stories live. Discover now