Aeternum

01. Aeternum

Aeternum es una palabra del latín que significa "para siempre". Se refiere a algo que dura por toda la eternidad sin fin o interrupción.

Nuestro amor es aeternum, durará para siempre; un amor inmortal.

Frases como "el tiempo lo cura todo", "tiempo al tiempo" ... son oraciones que escuchaba Marcia todos los días.

A pesar de que su vida tenía todo para entrar en eunomia, sin él no podía; le faltaba él.

Mi amor...

Flashback
Cuatro semanas atrás

- No, no, no... - la separan de él - ¡Esteban! – grita.

Veía como levantaban el cuerpo de su marido y lo subían a la ambulancia. No le permitieron ir con él.

Los sollozos de sus hijos, el dolor de su cuerpo, sus manos llenas de sangre, policías por todos lados, ¿así fue el fin de su tormento? o ¿era el inicio de uno nuevo?

"Pase lo que pase, vas a estar con nuestros hijos, así se me vaya la vida en ello"

Palabras del moreno se repitieron en su cabeza, la promesa que le hizo en una de sus últimas conversaciones.

Fin del flashback

Un mes después de aquel fatídico día, donde nuevamente la vida le demostró que la felicidad al parecer no estaba hecha para ella, las cosas se fueron acomodando. Cada uno de sus verdugos pagó las consecuencias de sus actos.

Santino murió.

Florencia y Cecilia se encontraban pagando una condena de ocho años en prisión por faltar a la verdad a la autoridad judicial.

Lucrecia sumó una condena de ocho años en prisión sin derecho a fianza, más trecientos sesenta días por faltar a la verdad a la autoridad judicial y falsificación de documentos.

La condena de Bruno sumó un total de 24 años de prisión por trata de personas, falsificación de documentos, fraude y complicidad en delito de homicidio.

Donato fue asesinado a manos de los tratantes de personas.

Y Esteban...

Esteban fue una víctima más que su pecado fue la omisión, aunque el derecho penal, lo castiga con quince a sesenta días de multa, esta ocasión no sería el caso.

- Y aquí esta. – voltea un poco la pantalla del monitor.

- Ay... es tan chiquita. – dice enternecida.

- O chiquito. – agrega.

- Tampoco será hoy, ¿verdad? – pregunta al verla mover el transductor y mirar la pantalla detenidamente.

- Creo que no. – ríe – Tiene sus piernitas cruzadas.

- ¡Ah no! – se queja – Para la próxima que no venga Hugo, él es quien le intimida.

- Lucía...

Risas por parte de Marcia y la obstetra al ver la pequeña riña que tenían los hermanos dio por terminada la consulta de la semana doce, oficialmente había comenzado su segundo trimestre de embarazo y todo riesgo se había esfumado; claro, tenía que seguir con sus respectivos cuidados, tomando sus multivitamínicos, estar libre de estrés el mayor tiempo posible y todo lo que conlleva querer lograr que la gestación llegue a término y de la mejor manera.

- ¿Van a la oficina o a casa? – pregunta mientras salen al estacionamiento.

- A la oficina, hijo. Omar necesita que revise las nuevas cláusulas de los contratos. – responde.