𝗯𝘂𝘁𝘁𝗲𝗿𝗳𝗹𝘆 ; lo'ak, neteyam.

xxvii. payakan.

act three. chapter twenty seven
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❪ payakan ❫

    LAHELA CAMINABA POR LA ORILLA DE LA PLAYA CON SUMA tranquilidad, sintiendo la brisa chocar contra su rostro y la calidez del sol en su piel. Abrió los ojos y miró hacia el agua cristalina, quedándose algo absorta durante 10 segundos por el paisaje frente a su figura y después desvió la mirada, para buscar un lugar con sombra bajo una palmera. Se sentó y cerró los ojos nuevamente para recargar la cabeza en el tronco de la palmera. Los días en el arrecife han ido yendo cada vez mejor para Lahela, gracias a los nuevos amigos que hizo en la pequeña reunión —fiesta— de hace una semana, se sentía más incluida, todo estaba haciéndola sentir muy cómoda y feliz.

A excepción del asunto con Lo'ak, aquel triángulo amoroso que se había formado entre Lahela, Lo'ak y Tsireya, la tenían de malas de vez en cuando, en realidad, la mayoría del tiempo. Y era verdaderamente algo inevitable, pues veía como esos dos eran muy cercanos, y su convivencia con Lo'ak ahora era un ligeramente incómoda, solo quería que las cosas se solucionasen y todo volviera a ser como antes.

Suspiró y dejó caer su cabeza hacia atrás, con los ojos cerrados, quedando en esa posición durante algunos segundos, simplemente escuchando el sonido de los Ilus a los lejos y el sonido del agua. Pero el momento fue interrumpido por un carraspeo a su lado izquierdo, abrió los ojos y se encontró con Lo'ak quien la miraba algo dudoso, balanceándose en sus pies, parecía nervioso.

— Hola.

— Hola... —Lahela apretó los labios después de haber murmurado su respuesta.

Lo'ak no respondió más y se sentó al costado de Lahela, bajo la atenta mirada de esta misma, que lo hizo tragar saliva. Volvió a carraspear y apoyó sus antebrazos en sus rodillas mientras la miraba de reojo.

— Bueno... y-yo... Lahela... —balbuceaba con incoherencia, haciendo que la fémina no lo comprendiera.

— ¿Uh-mhm? —le dio una rápida mirada a Lo'ak, mientras observaba sus propias decoraciones en su vestimenta.

Lo'ak imitó lo que Lahela hacía y sonrió al ver que la fémina le extendía una pulsera hecha por sí misma, que realmente la había hecho para él cuando Kiri junto a Tuk estaban mostrándole algunas cuentas para usarlas. Lo'ak la tomó entre sus dedos y acarició con suma gentileza los detalles del objeto, bajo la atenta mirada de Lahela, quien a pesar de todo, no podía despegar sus ojos de la figura del chico, mucho menos podía controlar el azote de su cola con la arena, aquello hizo reír vagamente a Lo'ak mientras se colocaba la pulsera en su muñeca derecha.

— Gracias... —Lahela sonrió con los labios apretados y Lo'ak la imitó, tomando la mano izquierda de Lahela para ponerla en su propio muslo— Ahora combinamos brazaletes, ¿genial, no?

Lahela rió cortamente por lo bajo y asintió. Después se quedaron sin hablar, en completo silencio, que en parte les resultaba algo incómodo, antes no tenían ese problema, antes ambos eran como un disco rayado y no se callaban nunca. Pero ahora los problemas amorosos estaban afectando bastante su convivencia, más que nada porque no buscaban solución alguna. Lo'ak carraspeó y aclaró su garganta antes de hablar.

— Estaba pensando... y-

Lahela puso una mano en el antebrazo del chico y lo miro con un falso puchero de tristeza, era claro que estaba burlándose de Lo'ak, como ambos solían hacer.