1.

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¡Hola! Quiero aclarar que este capítulo está modificado por completo (es una nueva versión)

Los otros se irán modificando día tras día, pero la historia no cambiará su rumbo, simplemente se irán errores básicos como la narración, guiones y ortografía.

Espero les guste.

Kevin:

Creo que, si pudiera relatar mi vida en un libro, las páginas de
este estarían más que vacías.

No porque no tenga vida o no haga nada —prácticamente no
lo hago—

Simplemente que no encontraría las palabras adecuadas para
poder describir las pequeñas cosas que hago.

Además… ¿A quién le gustaría leer un libro de un chico, que lo único que hace en su vida es estar echado en la cama mientras lee libros; esperando ser amado de la misma
manera?

A nadie le gustaría.

Tal vez a mí sí me gustaría, a fin de cuentas, sería un libro con el que me sentiría identificado.

O al menos eso fue lo que acabe escribiendo en mi libreta.

Siempre lo he pensado, pero por primera vez me he animado
a escribirlo.

—¡Kevin! ¡A dormir ahora mismo! —gritó mi madre desde atrás de la puerta de mi habitación.

Bueno, lamentablemente acabé siendo descubierto.

—¡Ya voy! Pero sin gritos que soy sensible. —dije y solo escuché un silencio como respuesta.

Vale, eso indicaba que ya era hora de irme a dormir.

————— ☼ —————

Acababa de levantarme de mi siesta a la que llamaba “Siesta rejuvenecedora”

¿Razón? Tengo la fiel creencia de que mientras más duermes
más hermoso eres.

Pero claro, soy yo, ni por qué duerma mil años me levantaré luciendo como los chicos de mi Pinterest.

¿Cómo le hacen para no tener ojeras?

Yo ya parezco un mapache con las bolsas que tengo debajo de mis ojos.

Y como si el día pudiera iniciar mejor, me había levantado asustado.

Vi más luz de lo normal y lo primero que pensé fue: “Ya son
las diez de la mañana”

Estado: valiendo verga.

Yo no sé qué mal le hice al mundo para despertar treinta minutos antes de que suene la alarma.

No entiendo la gente que dice que despertarse antes de que suene es bueno.

O sea, si entiendo que te da más tiempo de hacer cosas, y básicamente te das cuenta de que puedes dormir un poco más, pero yo y ser positivos no vamos juntos, así que me voy a
quejar lo que yo quiera.

Podría irme a dormir, pero la verdad es que no puedo.

¿Por qué? Pues…

1: después de que despierte ya no hay vuelta atrás, porque no me da sueño.

2: así pudiera dormir significaría que ya no me levanto ni aunque la casa se esté cayendo a pedazos.

3: Puedo quedarme mirando al techo mientras reflexionó de las cagadas de mi vida.

Qué vida tan perfecta la mía, ¿No?

Obviamente que me tocó levantarme de la cama e irme a duchar.

Podré ser vago y pendejo, pero nunca sucio.

¿Como En Los Libros? | COMPLETA ✓Where stories live. Discover now