𝑴 | "𝑇ℎ𝑒 𝐼𝑟𝑜𝑛 𝑇ℎ𝑟𝑜𝑛𝑒 𝑤𝑖𝑙𝑙 𝑏𝑒 𝑚𝑖𝑛𝑒， 𝑤ℎ𝑎𝑡𝑒𝑣𝑒𝑟 𝑡ℎ𝑒 𝑐𝑜𝑠𝑡"
𝐕𝐈𝐒𝐄𝐍𝐘𝐀 𝐓𝐀𝐑𝐆𝐀𝐑𝐘𝐄𝐍, la primera hija de Daemon Targaryen y Rhaenyra Targaryen. Una bastarda ante los ojos de muchos, pero la heredera al trono de...
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—RED KEEP ESTABA DESOLADO, cada habitación en silencio cubierta por las oscuridad, la noche era helada y se sentía un ambiente diferente a los demás noches. Visenya miraba su ventana, la luna llena que se asomaba por ella, sin poder dormir, acariciando su vientre de cinco meses.
Aemond se removió de la cama para abrazar a su esposa, pero encontró el frío en donde solía dormir. —¿Amor mío? —Murmuró adormilado.
La princesa volteó a verlo —Estoy aquí —Susurro.
—Vuelve a la cama —Le dijo mientras hacía un espacio para ella.
—Solo... dame un momento más, la luna está más hermosa que cualquier otro día.
Aemond se levantó de la cama y camino hacia ella, le dio un beso en el hombro y acarició amorosamente su vientre.
—Iré a tomar un poco de agua, ya vuelvo —Anunció.
—De acuerdo —Le sonrió.
A escondidas, el consejo del Rey se reunía a avanzadas horas de la madrugada, evitando ser vistos por alguien equivocado.
—¿Qué es lo que no pudo esperar una hora? —Preguntó burlesco Lord Lannister —¿Acaso adorne invadió?
El silencio abundó en el consejo.
—El Rey está muerto —Anunció Otto.
Los Lords del conejo y los guardias reales presentes no pronunciaron ni una palabra, procesando la nueva noticia.
—Nos lamentamos por Viserys el pacífico... nuestro soberano... nuestro amigo —Dijo haciendo pausas en cada frase —pero el nos dejó un regalo, con su último aliento le dijo a la Reina su último deseo: que su hijo Aegon... sea quien lo suceda como Señor de los Siete Reinos.
—Entonces podemos proceder con la seguridad de su bendición en nuestros planes —Afirmó dudoso Lord Lannister.
—Si, hay mucho por hacer como lo hemos discutido. Ahora hay dos Capitanes de la guardia de la ciudad que permanecen leales a Daemon, vamos a reemplazarlos, ¿Lord Lannister? —Dijo Otto.
—La Tesorería está lista, el oro se dividirá para su seguridad —Respondió.
—Envíen cuervos a nuestros aliados, Riverrun y Highgarden —Demandó Otto.
—¿Debo entender que miembros del consejo han planeado en secreto coronar a mi hijo sin mi? —Preguntó incrédula Alicent.
—Mi Reina... no era necesario mancillarla con sucias artimañas.
—No lo permitiré —Dijo Lord Beesbury —por que conspiran para reemplazar a la heredera elegida del Rey con un impostor.
—Su hijo primogénito difícilmente es un impostor —Dijo Lord Lannister.
