- ¿Qué dices si salimos de aquí?- Matt susurró en tu oído, poniendo su mano en tu barbilla para mirarlo.

Tu cara se puso caliente y luchaste por mirarlo. Abriste la boca para decir algo pero no salió nada. Matt sonrió ante tu supuesta timidez, sin darse cuenta de tu relación no oficial.

- No puedo tener novio- tropezaste.

Nunca lo habías llamado así antes. Nunca antes le habías dicho a nadie sobre él. Pero se sintió bien llamarlo así, aunque no estabas segura de que él te otorgaría el mismo lujo de llamarte su novia.

Matt sonrió y miró hacia abajo asintiendo con la cabeza. Retiró su mano de tu barbilla y la bajó hasta la curva de tu cintura.

- Lástima. Llegué demasiado tarde- dijo, extendiendo su bastón de nuevo- Que tengas un gran descanso de tu noche entonces. Ya nos veremos-

Lo viste caminar hacia el siguiente grupo de personas, mostrando el mismo encanto que hizo contigo, encontrando fácilmente una nueva conversación. Tu rostro se sonrojó mientras estabas atrapado en tus pensamientos, preguntándote cómo habría actuado Billy si una mujer le hubiera pedido ir a casa con él. No tuviste mucho tiempo para preguntarte sobre eso, Billy apareció detrás de ti y agarró tu brazo, llevándote a una habitación vacía.

- ¿Qué crees que estabas haciendo?- Billy gruñó, cerrando la puerta detrás de él.

- Yo no... yo no hice nada jadeaste, mirando a Billy poner sus manos en la puerta a cada lado de tu cara.

- Mierda. Estabas coqueteando con ese tipo ciego-

- Su nombre es Matt-

- Me importa una mierda cuál es su nombre. Eres mía, y si crees que coquetear con un chico al azar te dará algo, te equivocas, cariño-

- No estaba haciendo nada- respondiste- Además, ¿qué importa? No es como si estuviéramos juntos de todos modos-

Los ojos de Billy se pusieron negros cuando terminaste tu oración, presionándote contra la pared.

- Eso no significa que puedas abrir las piernas para cualquier chico que te quiera-

El calor subió a tus mejillas ante su acusación.

- No sabes una mierda- escupiste- Le dije que no. Le dije que...-

Billy te miró con impaciencia, esperando que terminaras tu oración.

- ¿Le dijiste qué?-

- Le dije que tenía novio-

- ¿Novio? ¿Soy tu novio ahora?-

- Solo dije eso para que se detuviera. Sé cómo te sientes acerca de-

- No, por todos los medios, continúa- bromeó- Diles a todos que soy tu novio-

No podías entender lo que quería decir con eso. ¿Estaba molesto porque dijiste eso? ¿Quería ser tu novio? ¿Quería que fueras su novia?

- Pero yo siendo tu novio significa que soy el único que puede tocarte, cariño- susurró, poniendo su mano en tu garganta para sujetarte a la pared.

Todo el aire abandonó tu cuerpo cuando Billy te tocó, devastando la piel de tu cuello con marcas de color púrpura oscuro, dejando un rastro de besos desordenados en tu pecho. Subió tu vestido por tus piernas, juntando la tela en tu cintura para tener espacio. Billy se arrodilló, dejando un rastro de besos en tus piernas hasta el vértice de tus muslos. Tus manos temblaban mientras pasaban por su cabello, tratando de atraerlo hacia donde más necesitabas su boca. Apartó tus manos de él, fijándolas contra la pared con una mano, usando la libre para jugar con tu clítoris a través de tu ropa interior.

One shot- Smut ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora