Capítulo 37

17 5 0
                                    

Capítulo 37



Le sonreí a Jayden para parecer tranquilo pero en realidad, no estaba tranquilo realmente estaba muy nervioso y con el estómago revuelto.

Tenía calor.

Y me dolía la cabeza otra vez. Mis manos estaban inquietas y miré a Jayden para hacer algo porque nos veíamos idiotas estando ahí sentados.

La música sonando a todo volumen, la gente no se había sorprendido de nuestra llegada y siguió haciendo de las suyas.

La chica que estaba con Bob, comenzó a vomitar al lado mío y mi corazón comenzó a latir fuertemente.

—Oh Dios... —Jayden susurro.

La mire con sorpresa y me sobresalte cuando sentí como su cuerpo se movía con violencia y vomitaba todo en el suelo.

Luego mire a mi amigo pidiendo ayuda.

— ¿Qué hacemos?

—Quédate aquí con ella...

— ¿A dónde vas?

—A pedir sin alguien puede ayudarnos...

Se levantó y se perdió en el mar de gente que estaban bailando con energías que no podía comparar nunca con las mías.

Apoye mi mano en la espalda de la chica para ayudarla, pero ella ya había terminado de vomitar, se alejó de mí y la mire atentamente.

— ¿Qué fue hacer tu amigo?

Tenía los ojos brillosos y vomito en los labios y en el cabello.

—Fue a buscar gente para ayudarte...

— ¿Médicos?

—No, alguien de aquí.

Su rostro permanecía preocupado y un poco cansado. Tenía los ojos decaídos como si estuviera enferma, pero solamente estaba alcohólica y descompuesta.

—Porque no pueden llamar a médicos.

—Lo se...

— ¿Me ayudas a ir a un baño?

— ¿Quieres vomitar otra vez?

—No, limpiarme con agua este desastre...

Y si lucia muy mal.

Busque con la mirada a mi amigo, pero como no veía que aparecía, la chica se colgó a mí y comencé a caminar tratando de que nadie nos empujara y me hagan caer con la pobre chica que estaba muy borracha.

Entre tanta gente, me dirigí a las escaleras, de seguro en el piso de arriba había un baño donde podía acudir.

La gente seguía en la suya como si nosotros fuéramos invisibles y eso me daba bronca, porque estaba con una chica descompuesta.

Mire y encontré una puerta donde podía guiar pero solo era una habitación, donde se encontraban dos personas, y no quise mirar más...

Seguí caminando con la chica colgada en mi cuerpo y empezaba a sentir un poco incómodo el cuerpo.

Hasta que por fin encontré un baño pequeño y vacío.

—Aquí estamos...

—Gracias...

La chica se dirigió a la canilla y comenzó a limpiarse con agua, las partes sucias de su vomito...

— ¿Quieres que llame a Bob?

Mentiroso (Segunda Parte De Los Demonios Mentales)Where stories live. Discover now