Mentiroso (Segunda Parte De Los Demonios Mentales)

Capítulo 24

Capítulo 24

¡Él no puede emborracharse de esa manera!

Sentía una leve presión en mi cabeza, mis ojos estaban cerrados. Tenía náuseas y la boca realmente seca.

Lo último que recuerdo fue que estaba en la fiesta y que alguien me empujo fuertemente lo que provoco que me callera de espaldas y me golpee la cabeza fuertemente.

Eso fue lo último que sentí.

Ahora siento la voz de Larry que está molesto y gritándole a una persona, pero por miedo a abrir los ojos, no quiero ver quién es esa persona a la que le está gritando.

Seguí haciéndome el que dormía o el desmayado.

— ¡Estaba desmayado...!

Siguió Larry.

—Y si yo no aparecía podía pasarle cualquier cosa...

¿Mis padres... donde estaban? No puedo creer que hasta el día de hoy a la única persona que le importe más es a mi productor. Mis padres seguían siendo lo mismo de todos los años, no había cambiado nada.

Me moví un poco porque ya estaba incomodándome al estar en la misma posición. Pude deducir que estaba en una almohada.

Por suerte, no había pasado nada malo.

Pero me dolía mucho la cabeza, las piernas me temblaban, tenía gusto a alcohol y a veces las náuseas se aproximaban.

¿Y Serena?

Ella había tomado el doble de alcohol y lo último que recordé es que se iba con un extraño, a no sé dónde.

¿Estaría bien? La preocupación empezó a invadir todo mi cuerpo. Realmente estaba agobiado, mi mente quería descansar realmente pero, no podía dejar las cosas como estaban... llegaba a pasarle algo a ella y no sé qué pasaría para todos y para mí. Aunque no estuviera conforme con ella, no podía dejar que la pasara cualquier cosa.

¡Jayden, tengo que hablar con Yannick cuando despierte...!

Fue lo último que sentí, con un golpazo de la puerta donde estaba. Abrí los ojos y estaba la habitación vacía.

Ellos salieron del cuarto.

No estaba en un hospital, por suerte.

Había hielo en la cama y yo estaba acostado y tapado.

He sufrido un desmayo... y estoy alcoholizado. Se supone que debería pensar que está bien lo que hicieron de dejarme aquí, sin que ningún médico me revisara...

Mi vista se nublo y permanecí quieto en la cama. Luego cuando el mareo se iba yendo, empecé por sentarme en la cama...

Mis mejillas estaban hirviendo y mi piel estaba fría, lo cual me hacía dar escalofríos en todo el cuerpo.

Me pare de la cama y una puntada en la boca del estómago se aproximó a mi cuerpo, lo cual me lleve la mano en la boca, porque no quería vomitar... pero luego se fue pasando y pasando.

Qué alivio, respire hondo para que los nervios no aparezcan en mi cuerpo y fui caminando hacia la puerta, para abrirla y cuando la abrí me encontré con Jayden quien parecía que estaba por ingresar a mi habitación.

— ¿Yannick?

— ¿Qué haces aquí?

— ¿No has perdido la memoria?

—No...

—Por el golpe en la cabeza...

— ¿Has visto a Larry?