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Varias horas más tarde. La casa Featherington era un caos.

Penelope se había puesto un vestido de noche hermoso para ir al palacio, contrastaba muchísimo con el vestido que llevaban sus hermanas, le gustaría que ellas también pudieran renovar sus colores y lucir más su color de piel y cabello rojo. Terminó de acomodar su peinado, miró el cielo nocturno desde su ventana y salió de la habitación para reunirse con sus hermanas en el salón. Por supuesto que de camino hacia las escaleras pudo oír como Prudence aún se lamentaba por no poder terminar de arreglar su maquillaje.

Luego de meditar pacientemente fuera de la puerta si debía entrar y ayudar a su hermana, desistió y bajo por la escalera, era mejor no buscar tensiones con Prudence.

- Penelope estas bellísima- Dijo su madre con una sonrisa al verla ingresar al salón- Ese color del vestido te luce mucho.

- Gracias mamá- Respondió Penelope y tomó asiento en el sofá. Era agradable recibir esos comentarios de su madre.

- Prudence está tardando mucho - Comentó su madre.

- Debe estar nerviosa, el Señor Dankworth se mostró bastante interesado en ella en el baile de ayer - Dijo Penelope alisando la falda de su vestido con las manos.

- ¿Creer que el Señor Dankworth se le declare? - Pregunto Lady Featherington emocionada

- Es probable que si - Contestó Penelope.

- No es un caballero respetable, pero...

- ¿mamá? - Pregunto con duda Penelope, sospechaba que su madre tenía algo en mente.

- Lo que pasa Penelope - Dijo su madre- Es que he deseado por tanto tiempo que una de mis hijas se case con un Bridgerton, sería la comidilla de Londres por semanas, sería todo un éxito.

Penelope se limitó a mirar a su madre. Deseo ponerse de pie y decirle a su madre: ¡y yo! Pero se resistió de hacerlo, lo cierto era que nadie efecto Lady Danbury y Madame Delacroix podrían pensar que ella tendría alguna oportunidad con un Bridgerton, y en eso solo consideraban a Colin.

- Mamá...

- Sería la envidia de todos en la ciudad - Continuo Lady Featherington.

- Aun así, Mamá, el Señor Dankworth posee una fortuna respetable.

- Supongo que sí, no una tan grande como la de los Bridgerton, pero respetable.

- ¿De que hablan tanto ustedes? - Pregunto Phillipa al ingresar al salón - No me digan que Prudence aun no esta lista.

- Ya estoy acá- Respondió Prudence llegando al salón.

- Por fin - Comento Lady Featherington- Mis niñas, hoy es nuestro turno de brillar, puede que Francesca Bridgerton se haya llevado toda la atención ayer luego del anuncio del compromiso con el Conde, pero esta noche es nuestra.

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- Colin, quiero pedirte un favor - Pidió su madre cuando ingreso a la habitación que aún conservaba de su hijo en la casa Bridgerton.

- ¿Qué planeas madre? - Pregunto dudoso Colin mientras arreglaba las mangas de su camisa.

- No es nada grave o complicado, prométeme que harás lo que te pido - Dijo su madre ayudando a su hijo con los botones de las mangas.

Colin le dio una sonrisa encantadora a su madre, no importaba la edad que tuviera, ella siempre lo ayudaría a lucir bien.

- Bien, lo que tu pidas madre - Contestó Colin fielmente, por su madre lo que sea.

Un marido para Penelope FeatheringtonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora