¿Por qué no podemos ser amigos?

49. Lo más parecido a un padre

<<Te quise cuando no quería querer a nadie...>>

•°•—·—∞—♦—∞—·—•°•

Tras su momento de silencio contemplativo, Filius y Severus se sentaron frente a la chimenea, disfrutando de un poco de whisky de fuego mientras hablaban sobre los tres niños.

— Esos polluelos harán grandes cosas en el futuro, te lo garantizo — aseguró el profesor de Encantamientos con una sonrisa cariñosa.

— No lo dudo — asintió el profesor de Pociones muy de acuerdo con él — El señor Zabini podría ser un aprendiz de pociones del que cualquier maestro se sentiría orgulloso.

— Si estás pensando en ofrecerle un aprendizaje deberías adelantarte a Minerva, por lo que me ha dicho,  también es bueno en Transformaciones — se burló Filius tomándole un poco el pelo.

— ¡Que lo intente! — exclamó el pocionista siguiéndole el juego.

— Te noto muy seguro... — río divertido el campeón de duelos.

— Zabini es un amante de las Pociones, Minerva no tiene nada que hacer contra mí — afirmó con tono presumido el ojinegro.

— ¿Y qué me dices de su madre? — cuestionó el medio gobblin, mirándolo con una sonrisa digna del gato cheshire.

— En cuanto al señor Nott... — cambió de tema rápidamente Severus, al darse cuenta que el italiano tampoco sería para él— Él ha leído más libros en la última semana que muchos adultos en toda su vida. Es un pozo de conocimiento, y solo tiene once años...

— Es un chico muy inteligente y maduro. Si no fuera porque conozco a su padre, habría pensado que tuvo una infancia difícil que lo hizo madurar pronto — estuvo de acuerdo Filius.

— Como Harry...

— Así es. Pero Harry, aunque es maduro para ciertas cosas, sigue siendo un niño que se ilusiona por las cosas más pequeñas — replicó con una sonrisa cariñosa el profesor Flitwick.

— Es un chico muy especial...  — admitió el slytherin, abriéndose por primera vez desde que él mismo era un niño — Estar cerca de él ha hecho que muchas de mis numerosas heridas se hayan cerrado y cicatrizado. Por primera vez en mi vida desde que ella murió puedo recordarla sin sentir dolor.

— Me alegra mucho escuchar eso, pequeño. Ella jamás habría querido que sufrieses con su recuerdo.... — lo felicitó el profesor de Encantamientos— Y puedo asegurarte que ahora mismo estará feliz viendo lo cerca que estáis tú y su hijo.

— Eso espero... Harry se parece a ella en algunas cosas, pero es bastante diferente a ella en realidad — comentó el profesor Snape con cara de póker.

— ¿Es eso un problema? — preguntó el campeón de duelo, mirándolo con gesto serio.

— Claro que no, es solo que... — negó el pocionista sin saber bien cómo explicarse.

— Sabes que puedes decirme cualquier cosa, ¿verdad? No acostumbro a juzgar, ni tampoco soy partidario de las miradas de decepción... — aseguró Filius, poniendo su mano sobre el brazo del más joven.

— Harry no se parece casi nada a Potter más allá del físico — murmuró Severus con gesto distraído.

— Estoy de acuerdo con eso — asintió el Jefe de Ravenclaw.

— Y tiene cosas de Lily, pero tampoco tantas. Él... — continuó el ojinegro antes de detenerse de nuevo.

— ¿Él?