Echaba mucho de menos a su madre. La sensación de seguridad que ella le daba era algo que deseaba desesperadamente ahora.

"Tendré que matar" murmuró para sí mismo. "Tendré que ser despiadado e ir en contra de todo lo que me enseñaron hacer. Ir en contra de todo lo que soy"  Sin darse cuenta, de lo que decía. Draco tragó saliva y asintió. Absorbiendo todo esto lentamente, él se contestó "Lo haré"con un suspiro cerró los ojos, trató de concentrarse en la comodidad de su alrededor. Dejó de lado sus sentimientos tumultuosos y disfrutó de la nueva tranquilidad que calmaba su alma.

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Una preocupación ruidosa creció dentro de Legolas cuando Sam le contó que Draco se había ido solo al bosque. Sam también había dicho que Gimli había ido tras él.

Después de buscar un poco, los descubrió junto al arroyo que corría por el bosque a cierta distancia de sus habitaciones. Con pasos silenciosos se acercó al enano, que estaba parado un poco lejos viendo al menor dormir. Al notar el movimiento, Gimli se giró hacia él.

"¿Qué haces?", gruñó.

"Estaba preocupado"

"Está bien" declaro el enano "Yo lo estuve vigilando"

Asintiendo, Legolas dijo "Vete estará con él"

Gimli miro al elfo y solto un bufido que sonó casi como un gruñido. "¡No! ¡Soy capaz de cuidarlo, orejas puntiagudas!"

Los ojos de Legolas se entrecerraron. "Tal vez él no desea tu compañía, pequeño"

De hecho, Gimli gruñó esta vez y estaba a punto de replicar antes de que Draco, molesto, interrumpiera "¡Ustedes dos, son muy ruidosos!"

Draco se incorporó de un salto, miró a su alrededor con el ceño fruncido, se dio cuenta de que había dormido en el bosque. Gruñendo mentalmente, miro a sus despertadores con fiereza. "Váyanse, quiero estar solo. Por favor"

"Te vas a resfriar" acuso el elfo

"Tengo un hechizo calentador Alteza"

"Me quedaré contigo" declaro Gimli.

"Y yo también," prosiguió Legolas.

Gimli giró hacia el elfo "¡Soy capaz de cuidarlo sin ti, orejas puntiagudas!"

"Yo también" admitió el elfo "Y él no tendrá que agacharse"

"¡Tu! ¡Elfo, él no quiere tu compañía, estábamos mejor sin ti!"

"¡Paren!" levanto la voz el ojigris "No quiero ofenderlos, pero...estoy harto y cansado de escucharlos discutir todo el tiempo. ¡Lo escucho todo el día y no tengo la intención de escucharlo toda la noche!"

Los dos se quedaron en silencio ante sus palabras. Se miraron el uno al otro, el desagrado aún era evidente en sus ojos. Fue Legolas quien habló primero.

"Si acordamos no pelearnos, ¿nos permitirás acompañarte?"

"¿Y por qué querría que hicieran eso?" replicó

"Porque es obvio que no estás bien, niño. Algo paso, pero actúas como si nada estuviera mal. Podríamos ayudar a tranquilizarte" Gimli declaró lógicamente.

Draco levantó una ceja dudando seriamente de las palabras del enano. Sin embargo, puede que no fueran sus amigos, pero eran lo más cercano que tenía aquí. Además, parecían realmente preocupados por su bienestar. Y aunque no estaba listo para admitirlo, los necesitaba en algún nivel. Desinflando sus pulmones con decisión, asintió brevemente hacia ellos.

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