Su verdadera cara

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Capitulo 32


No soy estupida en un inicio no comprendía con que fin me habían inculpado del asesinato de Zeydi, pero ahora al ver a un hombre frente a mi puerta todo queda más que claro. Quieren tenerme vigilada. Por ello supongo que tal vez Black sabe de las visitas de Nicholas al centro. Y justo para nuestra mala suerte ha sido un día antes de nuestro escape, y no existe manera de informarle a Nicholas, no si me encuentro recluida en mi habitación sin derecho a salir siquiera a charlar con Dennis.

Paso las manos por mi cabello tratando de aminorar las punzadas que se crean en mi cabeza, sea lo que sea que me han inyectado me ha hecho dormir un par de horas. Elevo la cabeza a la ventanilla de la habitación y me pongo de pie de un salto para ir a ella.

—Sacame de aqui— exigo al golpear el cristal de la pequeña ventanilla.

El hombre al otro lado no se inmuta por mi voz, nisiquiera me mira.

—¡Saquenme!— insisto golpeando repetidas veces el cristal captando la atención del hombre, quien cierra la ventanilla.

—Imbecil— escupo volviendo a mi cama.

El día siguiente despierto más temprano de lo usual al saber que hoy es el día. Hoy se supone que llevaremos acabó el plan de Nicholas de salir de esta maldita institución falsa.

La puerta frente a mi comienza a crear un rechinido al ser abierta e institivamente me pongo alerta. Dennis entra con una bandeja de comida haciendo que me relaje. Voy hacia esta, tomo la bandeja y la depósito en la mesa.

La rubia da una corta mirada hacia la puerta donde ya no se encuentra el hombre y vuelve a mi.

—¿Cómo estás? me contaron todo— musita, con tristeza reflejada en sus ojos.

—Yo no lo hice— murmuro con mis ojos aguandose.

—Lo sé— esta asiente mirandome cálidamente.

—¿Y que crees que pasara?— pregunto angustiada — ¿Crees que Nick pueda entrar? me tienen vigilada y si algo sale mal y si...

—Tranquila Megan— Dennis me toma de los hombros tratando que me calme —. Todo saldrá bien, ya lo he puesto al tanto de tu situación.

—¿El plan sigue en marcha?

Esta asiente en respuesta.

—Cuando este aquí yo te sacare de tu habitación y te llevara a tú encuentro con él, pasaré a las 3 am, necesito que estés despierta, todo saldra bien, ustedes lograran salir— indica Dennis hablando muy confidencialmente.

—¿Y que pasara contigo?

Me parece que Dennis también está en peligro, quien sea que sea Black es un hombre peligroso.

—Nadie tiene porque enterarse que los ayude, las camaras serán hackeadas por tu amigo y no habrá ninguna imagen que me comprometa, cuando me cuestiónen sobre si me mencionaste algo sobre todo esto, mentire, les diré cualquier cosa; no debes preocuparte por mí, si no por ti.

Hago el ademán de darle un abrazo, pero el sonido de unos pasos resonar nos pone en alerta a ambas. Dennis me da una mirada tensa y yo corro a sentarme frente a la mesa y fingir que como mi desayuno.

Patrick entra por la puerta.

—Veo que tú lograste convercerla de comer algo, el resto de los enfermeros eran echados con insultos y golpes. 

—Es que los demás son unos idiotas al igual que tú — escupo.

Dennis me da una mirada de desaprobación, sé que no es el momento de actuar de esta forma, pero me es muy difícil controlarme al ver a Patrick como verdaderamente es. Un hombre prepotente y manipulador. Nada que ver con el Patrick que ha pretendido ser al inicio. Él aprieta su mandíbula dándome una mirada mortalmente seria que me pone realmente nerviosa. Jamás había visto la malicia que hay en sus ojos, pero ahora su mirada fría me asusta un poco.

—¿Le diste su medicacion?— pregunta Patrick al dirigirse a la enfermera.

—Si— responde un tanto encogida en su lugar.

—Pues retirate necesito hablar con ella.

Dennis parece dudar, sin embargo si se opone sera algo sospechoso, así que no le queda más remedio que salir aunque no parece muy deacuerdo en dejarme sola con este.

El castaño toma asiento en la silla frente a mi al otro lado de la mesa.

—Debo notificarte sobre algo— inicia a lo que me mantengo viéndolo con mis brazos cruzados y semblante serio —. Megan el director del centro no quiere que tu asunto llegue a manos de la justicia, por ello el caso de Zeydi no saldra de la institución al igual que tú— explica él.

Su información me precupa de sobremanera,  sin embargo trato de no demostrarlo al no inmutarme. Su forma de hablar ya no es la amable y empatica que usaba antes, si no seria y cargada de veneno.

—Espero y no necesitemos usar algún otro medio para tu recuperación, se me han ocurrido muchas cosas, de hecho dolorosas, pero sé que podrían garantizar tu recuperación— no me inmuto nuevamente, el hombre deja su asiento y se sitúa a mi lado —¿Y que tal las pesadillas y los delirios del pasado?— pregunta cerca de mi oído, su aliento hace que mi piel se erize, aprieto entre mi mano una cuchara de plástico que se encuentra en la charola con la creciente intención de apuñalarlo con esta. Muerdo mis mejillas tratando de controlarme, este se aleja y camina hacia la puerta para después salir sin más con una arrogante sonrisa.

—Imbécil— murmuro al cerrarse la puerta y pasar la manos por mi cabello con desespero.

Las horas pasan y después de la visita de Patrick he permanecido callada y ansiosa caminando de un lado a otro. Llegada la media noche finjo dormir ya que el guardia de afuera me ojea constantemente.

Un ronquido me hace dar un respigno ya que estoy apunto de cerrar los ojos. Me siento de golpe y froto mis ojosa tratando de mantenerme despierta. Según el reloj en mi habitación faltan solo 10 minutos para las tres.

Me pongo de pie y recargo mi espalda en la pared miéntras observo la puerta mordisqueando mis uñas con ansiedad.

Unos pasos resuenan por los pasillos llenando el silencio que hay. Supongo que es Dennis, los pasos cesan frente a la puerta y maldigo que la ventanilla esté cerrada. Me preparo para salir al acercarme a la puerta.

Cuando esta se abre restrocedo al ver que no es Dennis quien abre la puerta, si no Patrick siendo acomapañado de tres hombres armados. El médico ya no lleva la bata de siempre si no un traje negro.

—¿Que hacen aquí?— pregunto mirando de un lado a otro a la defensiva sin poder ocultar el miedo que crece dentro de mi.

—Te llevaremos con él— me tenso, pero trato de actuar desconcertada — ¿Megan en verdad crees que soy tan estúpido para no notar al idiota ese diambular por mi institucion?

Veo a este con asombro fingido, sin embargo  pronto decido parar con este juego de la confusión, es obvio que él ya está al tanto de todo, al igual que yo.

—Así que este es el verdadero Patrick o debería decir Black— musito seria tan cuanto esa revelación a llegado a mi.

Siempre tuve frente a mi al hombre que nos habia estado cazando. El hombre causante de la muerte de mi padre.

El desconocidoWhere stories live. Discover now