Hasta el final del camino

CAPITULO 2

El omega pensado en la mujer del local donde había entrado, le extraño que no le hubiese cobrado nada por usar el baño. La beta la saludo con una pequeña sonrisa, al igual que cuando se fue, aquella mujer se sentía incómoda con la presencia de Nevan.

-Usted ¿Sabe dónde puedo encontrar esto? – le enseño el cartel – Estoy buscando trabajo.

-¿Está seguro? – pregunto preocupada – Hay trabajos más cómodos para usted, podría preguntar si alguien necesita ayuda con alguna de sus tiendas.

-Quiero saber dónde se encuentra, necesito el trabajo lo más pronto posible... - a la mujer le temblaron la manos - ¿Ocurre algo? Es un trabajo normal ¿no? Puedo cargar con cajas.

-Una amiga mía necesita ayuda con su frutería, puedo preguntarle si...- Nevan negó con la cabeza – La tienda es pequeña, pero cobraras bien, puedes permitirte un piso por aquí.

-Necesito saber dónde se encuentra este lugar... - la beta suspiro con tristeza y le explico cómo llegar – Gracias – le sonrió - ¿Puedo hacerle otra pregunta? – la mujer asintió - ¿Sabe dónde me puedo quedar a dormir? Un lugar que sea barato.

-Puede quedarse aquí – le respondió con cierta prisa – Es un buen lugar, podrá descansar y bañarse cuando quiera, también puede comer... - le sonrió con ternura – Antes no pude explicarle muy bien, se fue demasiado rápido.

-¿Cuánto cuesta pasar una noche aquí? – la beta negó con la cabeza.

-Es un lugar protegido por la familia Corbin... - había escuchado hablar de esa familia alguna vez en las noticias – Crearon varios hostales en el barrio de los omegas, para que pudieras descansar. Usted no debe pagar nada.

-¿Está segura? – la mujer asintió – No estará intentado engañarme.

-No, señor, nunca haría eso... - le señalo el letrero de la entrada – Este lugar es para omegas, el señor Lander hizo todo lo posible para asegurar vuestra seguridad, ellos no ganan nada con todo esto.

-Puedo quedarme a dormir aquí, entonces – asintió - ¿Por cuánto tiempo?

-Por el tiempo que desee, si necesita ayuda de cualquier otro tipo, podemos informar al señor Lander para que hable con usted, eso sí, debería ir a al orfanato Corbin.

Esa mujer, no le daba ningún tipo de miedo a Nevan, aunque creía que detrás de toda esa amabilidad había algo escondido, no era tan fácil conseguir todo lo que le estaba prometiendo. La señora lo miraba preocupada por si había dicho algo mal.

-¿Seguro que no hay nada escondido? – asintió – No intentará mentirme ¿verdad? ¿Este lugar es seguro?

-Suelen venir omegas que han huido de sus casas, o que se han quedado embarazados tras una violación – a Nevan se le helo la sangre – La familia Corbin quiere ayudarlos a tener una vida mejor, por eso ofrece este tipo de lugares.

-¿Solo hay omegas? – negó con la cabeza.

-A veces, también vienen mujeres betas, aunque no suele ser algo muy común – respondió con tranquilidad – Cada habitación cuenta con una cama y un baño, no tendría que usar el baño común, si eso es lo que le preocupa. Aunque debería ir a la cocina común para poder comer, puede llevar la comida a su habitación si le incomoda estar con más personas.

-¿Qué tengo que hacer para conseguir una cama? – la señora le enseño unos papeles – Tan solo debo rellenar esto ¿verdad?

-Podría ser lo más sincero posible, por favor. Queremos ayudarle si es que se encuentra en algún problema, puede solicitar inhibidores si su celo está cerca, tan solo debes poner un tic en esta opción – cada vez se sentía más cómoda a su lado – Le asignaremos una habitación por la tarde, cuando venga ya la tendrá.