Sweet Little Creatures

El principe y el mago

 Ambos permanecían fuera de la casa de acampar, disfrutando de la bella noche estrellada, lo cálido de la fogata y la bolsa de malvaviscos que estaban por terminar. Junnie ya se encontraba dentro de la casa de acampar, dormido.

El pequeño cayó cuando finalizaron la historia, a los pocos minutos, el niño había cerrado sus ojitos y dormido. Hyungwon lo dejó dentro de la casa, claro que la casa estaba a la vista para estar al tanto del pequeño, por cualquier cosa.

Como él y Minhyuk todavía se sentían tan cansados, decidieron quedarse fuera, y platicar.

—¿Entonces ese príncipe se enamoró del mago? —preguntó Minhyuk.

—Mhm... —respondió con su boca cerrada debido al malvavisco que había comido.

—¿Por qué se enamoró de él?

Hyungwon sonrió y dejó a un lado su brocheta de malaviscos casi terminada.

—Recuerdo que en los pocos días que se conocieron, el mago le dijo al príncipe que tenía una magia especial. El príncipe no le creyó del todo, y después terminó perdidamente enamorado debido a esa magia mencionada. El mago lo tiene completamente hechizado bajo un encanto de enamoramiento. Ese mago es muy especial y único, nadie es como él, y ese es uno de sus poderes más grandes. Tiene una personalidad fantástica, y que hablar del carisma y personalidad, también es lindo, tierno y muy atractivo. Todas esas cosas fueron los elementos para su encantamiento para el príncipe, y eso fue lo que terminó hechizándolo. Ahora está perdidamente... completamente enamorado de él —suspiró, sonriendo y agachando su cabeza.

Fue muy largo el tiempo en el que Hyungwon se abrió de esa forma tan sentimental con alguien, más bien, fue largo el tiempo en el que Hyungwon se sintió de esa forma por alguien, por no decir que nunca.

—¿Sabes porqué el mago se enamoró del príncipe? —levantó su cabeza a hacía Minhyuk, esperando su respuesta con cierto nerviosismo.

—Oh, claro que lo sé. Él me lo dijo —sonrió—. Cuando el mago lo vio por primera vez no podía negar que el príncipe era bello, sobre todo en esa capa tan elegante, que lo hacía ver mucho mejor. Después le encantó la forma en que trataba el duendecito, parecía saber lo que hacía, y era auténtico con él, esa fue la segunda cosa que lo enamoró. Sabía que estaba sintiendo algo diferente a lo de siempre, y era por ese príncipe. Cuando al fin lo aceptó, no dudó en hechizarlo con ese encantamiento tan especial. Fue cuando el príncipe lo comenzó a atrapar aún más, se mostraba de una forma inigualable, tan caballeroso y detallista, atento sobre todo, digno de un príncipe. La atención que le daba y el cariño con que lo hacía terminó dejándolo completamente enamorado de él.

—¿Crees que sea poco tiempo para que el príncipe le declare algo importante al mago? —acercó su cara a la de Minhyuk.

—Creo que sea lo que vaya a decir... el mago lo está esperando con mucha emoción —pasó su mano por el castaño y suave cabello de Hyungwon.

—El príncipe quiere decirle al mago que lo ama, que lo ama mucho —pasó su dedo por la mejilla de Minhyuk.

—Querido... te contaré un secreto —susurró—. El mago también ama al príncipe, pero le daba miedo decírselo —pasó su mano a la nunca de Hyungwon.

—Te amo, mago.

Acortó la distancia, besándolo lentamente. Demostrándole todo lo que ha guardado en las últimas horas por no querer hacerlo frente a Junnie.

—Te amo, príncipe —sonrió en medio del beso.

Entonces comenzaron una larga y linda guerra de besos.