Sweet Little Creatures

¿Papá?

 Hyungwon era feliz, se sentía completamente satisfecho y a gusto con su novia, Nayeon. Todo parecía ir de maravilla con él y su relación... hasta que comenzó a dudar de su sexualidad, con el paso de los meses al lado de Nayeon dejó de sentirse cómodo a su lado, infeliz.

Hyungwon siempre había sentido una atracción hacia las chicas, pero también sentía algo de atracción por los chicos. Pensaba que era algo pasajero, y siguió en su zona de confort relacionándose con Nayeon, su primer relación formal y duradera.

Hyungwon fue invitado a una fiesta al igual que Nayeon, ella no podía ir pero Hyungwon sí, fue él solo a pasar un rato de diversión. Conoció a un chico, Jeonhan quien se le hizo bastante atractivo a Hyungwon, despertando de nuevo su curiosidad. Aprovechando que no estaba con Nayeon y su confusión... experimentó con Jeonhan, descubriendo que realmente le gustaba más estar con chicos que con las chicas, pero había un problema. Hyungwon tenía una relación seria con Nayeon, y tenía que hablar con ella, confesarle sobre sus dudas y lo que hizo esa noche.

Hyungwon estaba en el comedor del instituto esperando a su novia, Nayeon. Al verla a lo lejos la llamó con la mano. Nayeon fingió una sonrisa y caminó hasta donde estaba. Esa mañana Hyungwon estaba decidido a confesarle lo que hizo en la fiesta y sobre su sexualidad que lo tenía muy escondido dentro.

—Buenos días, Chae —besó su mejilla.

—Hola, Won —respondió a secas.

Nayeon siempre había sido la chica más linda y amable de la escuela, nunca respondía de mala gana y al escuchar su respuesta Hyungwon se preocupó.

—¿Sucede algo malo?

Dentro de él tenía el pavor de que Nayeon se hubiera enterado por terceras personas de lo qué pasó hace días en la fiesta.

Nayeon suspiró pesadamente, giró su rostro hacia el de Hyungwon para mirarlo a los ojos.

—Tenemos que hablar de un tema.

— Nayeon, me estás preocupando. ¿Está todo bien? —frunció su ceño algo confundido.

— Hyungwon... no he estado bien en las últimas 3 semanas. Todo me da náuseas, vomito todo lo que como, tengo fuertes mareos...

—T-tú supones q-que... —sus manos comenzaron a temblar ante el simple pensamiento.

—Sí, creo que estoy embarazada —agachó su mirada.

Hyungwon se quedó mudo por unos largos minutos, ninguno hablaba, estaban en un completo silencio. Arrepintiéndose de haber hecho lo que hicieron para llegar a aquella situación. Intentaban calmarse y anular la posibilidad, pero... era imposible, uno de los mayores temores de cualquier adolescente les estaba pasando a ellos. Justo cuando Hyungwon había descubierto su fuerte inclinación por los chicos pasa eso.

—¿T-te hiciste ya la prueba? ¿Fuiste al médico? — Hyungwon rompió el silencio con una voz tan baja que apenas podía escuchar Nayeon.

—Estaba esperando decirte para que me acompañes en el momento que la haga y dé el resultado. No quiero estar sola en ese momento —las lágrimas no tardaron en correr de sus ojos hasta sus mejillas.

—Entonces, ven —la tomó de la mano y la paró de su asiento—. Iremos por una prueba ahora mismo —tomó su mochila junto con la de Nayeon y las puso sobre su hombro.

Nayeon asintió lentamente aún sin hablar y salieron del instituto en busca de alguna farmacia. Cuando al fin la encontraron Hyungwon entró a comprar la prueba, prefería ser él el criticado por ser un adolescente comprando una prueba de embarazo, a que Nayeon pasara por esa situación tan incómoda.