¡Hey you, with the pretty face!

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Hyungwon llegó a su casa a las 12:00 pm. Su felicidad no podía contenerla, finalmente tenía algo con una gran persona.

Con cuidado dejó las llaves en el comedor, tratando de hacer el mínimo ruido para no despertar a su pequeño, o a Haneul. Sobre la misma mesa, vio una pequeña nota con la caligrafía de su madre.

"Espero todo haya salido excelente, amor. No quise molestarte con un mensaje inoportuno, por eso te dejo esta nota. Decidí irme mañana por la tarde, después de la comida. Me gustaría que invitaras a Minhyuk y ahora si tenerlo en la casa oficialmente como tu novio. Quisiera despedirme de él antes de irme a casa. Nada me haría más feliz que eso.

P.D: Junnie no quería dormirse, hice todo lo posible, nada funcionó. Se hizo el dormido, pero sé que él no duerme hasta verte en casa. Deduzco que sigue despierto esperándote. Deberías ir a verlo y darle su besito de buenas noches."

Dejó su nota a un lado, soltó un suspiro algo frustrado por saber que Junnie seguía despierto. Eso no era bueno para él.

Sin pensarlo dos veces, fue directo y sin escalas a la habitación del pequeño. Lo sorprendió jugando con su conejita, jugaba con sus orejitas y tarareaba una cancioncita en voz baja.

—Vampirito, ¿por qué sigues despierto, cariño? Ya es muy tarde para ti, mi amor.— se sentó en la orilla de la cama.

—Ou, papi... yo... esperé a ti.— escondió un poco su carita entre las sábanas como forma de protección ante una llamada de atención de su padre.

—Es muy lindo de tu parte, mi vida. Pero no es bueno para ti, ¿sí? Prometo venir a darte un besito de buenas noches todos los días que llegue tarde, pero tú debes estar dormidito.

Era una promesa fácil de cumplir por el simple hecho de que eso hace desde hace mucho tiempo y su pequeño no lo nota.

—Está bien, papi.— dejó un beso en su mejilla, después lo arropó tan bien como pudo. —¿Papi feliz? ¿Papi y Minnie juntos?— preguntó aún removiéndose entre las sábanas.

Hyungwon estuvo a punto de negarle las cosas, de no decirle nada, hasta que recordó su sincera plática con él el día anterior y el ya no ocultarle nada. Podía decirle las cosas con total sinceridad. Eso le quitó un peso de encima.

—Así es cariño, ahora estamos juntos. Como tú y yo lo deseábamos.— Junnie soltó una risita tierna y emocionada.

—Papi feliz, siiiiip.— dijo con su voz ya cansada y adormilada.

—Muy feliz, cariño. Ahora duerme y descansa. Sueña lindo, y recuerda que papi te ama con todo su corazón.— besó su frente.

Se quedó unos momentos en su habitación esperando a que se durmiera. Antes de salir observó el dibujito de Junnie, ese primer dibujo en donde Minhyuk se incluía en la hoja blanca llena de trazos de colores. Hyungwon decidió ponerla en la habitación de Junnie, era mejor que el pequeño conservara su obra maestra.

—Sé que seremos felices nosotros tres.— murmuró con una sonrisa.

Hyungwon despertó mucho más temprano que todos en la casa, incluso que su madre.

Su ánimo estaba en el punto más alto. La razón, finalmente sentirse completo, gracias a una persona en especial, esa persona que con su presencia hizo cambios importantes en su vida.

Se dispuso a preparar el desayuno, esa vez tuvo la iniciativa de hacer el típico desayuno inglés que consistía en hacer huevos fritos, acompañados de salchichas, tocino, judías estofadas, champiñones y pan tostado. Acompañado de té y para Junnie su jugo. Permitiéndose el gusto de una comida no tan saludable.

Sweet Little Creatures Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt