Jessica & Tiago PZK | +18 - lanenadeltrap

Cap. 3 (+16) - eximición.

unas horas después...

POV Jessica

Fuimos agarrados de la mano hacia mi habitación. Por cada escalón que subíamos, las ganas iban aumentando. Al llegar a nuestro destino, él cerró la puerta detrás de sí y se fue acercando con seguridad y una mirada lujuriosa, la cual me hacía arder por dentro. Sus manos empezaron a recorrer mi cintura y caderas con suaves caricias, y el vestido de seda que había elegido para esta ocasión se movía al ritmo de su toque. Dejé que disfrutara de mi cuerpo un poco más, se sentía demasiado bien.

unas horas antes...

Me preparé para este momento, pues no esperaba para nada su visita. No entiendo cómo llegaron hasta aquí ni qué es exactamente lo que hacían en mi casa. Fuese lo que fuese, respiré hondo y me excusé del Italiano con el que hablaba.

Jessica: Ámbar, contrólalo todo, ahora vengo. Ven a por mí si pasa cualquier cosa. - ella asintió con aires de tensión.

Me dirigí hasta la entrada principal y allí me los encontré, a un lado de la puerta. Duki fue el primero en notar mi acercamiento hacia su grupo.

Duki: Pelotuda, ¿dónde carajo te metiste todo este tiempo? - sonrió y vino a abrazarme, su calidez calmó mis nervios.

Lit: Vení acá. - copió las acciones de su amigo.

Me sentí reconfortada por sus saludos, pero Tiago también estaba allí y no fue tan amistoso. No sabía si reír o llorar en ese momento. Lo que otros sosegaron dentro de mí, volvió a aparecer de golpe y con más fuerza.

Tiago: ¿Vos fuiste la que metió a mi hermana en esto? - habló con moderación, aunque la ira de igual forma podía con su tono.

Jessica: No exactamen... - me cortó.

Tiago: ¿¡Cómo que no!? ¡Te vas sin decir ni una palabra, me dejás solo y encima te llevás a mi familia donde nunca debió ir! - el ataque me dolió en lo más profundo de mi alma, a pesar de todo, intentaba controlar mis emociones.

Jessica: Tiago escuch... - volvió a interrumpirme.

Tiago: No, ¡pará! Me dejaste como el orto Jessica, no podés pedirme que ahora te escuche porque ya tuve suficiente escuchando mis propios pensamientos. Me hiciste sentir que no valía una mierda, y la mierda acá sos vos. - una lágrima de rabia deslizó por su mejilla y a mí no me faltaba mucho para romper a llorar.

A causa de los gritos del chico, pude oír por el pinganillo insertado en mi oreja que Gabriel avisó a mi seguridad para que viniesen a por Tiago. Tardaron muy pocos segundos en llegar y apuntar con sus armas al objetivo, que en este caso era el hombre del que seguía enamorada.

Jessica: Todos fiquem parados. - me miraron con extrañez. - Agora, abaixe suas armas! - cumplieron mi orden y bajaron sus fusiles.

Lit: ¿Desde cuándo habla chino esta piba? - le susurró a Duki, se miraron extrañados.

Jessica: Oye Tiago... si no querés creerme no lo hagás, pero quiero que entrés a la fiesta conmigo y que nos despejemos un poco, ¿sí? Tenemos muchas cosas de las que hablar... - debió quedarse paralizado después de todo este drama que sucedió de golpe.

Su estado de shock se apoderó de él y vino conmigo sin decir una palabra. Duki y Lit me siguieron también, pero Gabriel los paró y les indicó el camino hacia la mesa de bebidas y comida. Como no tenían nada más que hacer, fueron hacia allí. Mi asistente no se despegó de ellos en ningún momento, y aunque no entendía el porqué, no me quejé.

Jessica: Así que... ¿has estado mal todo este tiempo? - le pregunté intentando no perder los nervios.

Tiago: ¿Tú lo has estado? - evitó nuestro contacto visual.

Agarré dos copas de champán del camarero que daba vueltas por la sala y le ofrecí una a Tiago. Sin rechistar, la cogió y le dio un gran sorbo.

Jessica: Lo he pasado igual que tú, ¿crees lo contrario? - fruncí instintivamente el ceño.

Tiago: Seguro que mejor que yo estabas. Me abandonaste, nos abandonaste a todos sin darnos ninguna explicación. - se dignó a mirarme a los ojos por fin.

Jessica: Había razones Tiago, y os las dije... bueno, a ti no. - observé el resto de personas que conversaban formalmente. - Les dije a los chicos que no te dijeran nada.

Tiago: ¿Qué es lo que no me dijeron? - me cuestionó confundido.

Jessica: Que yo... me fui porque no me gustaba esa vida. No me agradaba el echo de levantarme cada mañana con una sensación de angustia, con recuerdos horribles de la muerte de mi hermano. Vosotros me recordáis eso, ¿es que ya te olvidaste de que me secuestrasteis?

No respondió, el silencio se presentó repentinamente. Yo no tenía nada más que decir, al menos en ese momento, y parecía que él tampoco iba a hablar. Entonces decidí mirarlo por última vez y como no dio signos de querer arreglar las cosas, di un paso para dirigirme hacia el Italiano con el que anteriormente andaba haciendo negocios.

Y justo en el momento en el que pensaba que ya todo había acabado, noté un suave agarre en mi muñeca. Tiago vino hacia mí y me miró con seguridad.

Tiago: Solo quiero que sepas que te he echado mucho de menos, y que jamás te quise solo porque te necesitábamos. Supongo que el abandono que nos has hecho compensa que nosotros te lo quitásemos todo... ¿no? - se le veía arrepentido.

Jessica: Jamás me fui por rencor, y además, ¡mira lo que he conseguido! - sonreí y miré la casa. - Al final del día, todo son aprendizajes.

Tiago: Pero yo no quiero que tú seas un aprendizaje, yo quiero que aprendamos juntos. - sus ojos empezaron a aguarse.

Jessica: Entonces tendremos que empezar de cero. - y después, me encaminé hacia el Italiano para seguir con su conversación.

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apartado de traducciones.

Todos fiquem parados.
— Quédense todos quietos.

Agora, abaixe suas armas!
— Ahora, ¡bajad las armas!

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• En el siguiente capítulo habrá +18, no se preocupen ;)