Capítulo 17: Número 13: Malacores

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-No somos los únicos piratas, nosotros controlamos estos mares, pero hay un mundo entero por controlar y nuestros hermanos lo harán.

-También los venceremos.

-Ja, no estás pudiendo conmigo, como para poder con todos.

-No estoy solo.

-Los mequetrefes de tus amigos, ja, mis hombres se han ocupado de ellos.

-¿Estás seguro de eso Capitán?

-Por supuesto, ja, mis Malacores podrán con ellos.

-Tus Malacores están muertos porque mis amigos los han eliminado, mala suerte.

Cañonazos, así me gusta amigos, justo cómo lo planeamos.

-¡Imposible! Bueno, da igual, tú caerás conmigo, nos hundiremos juntos.

Este pirata tiene dos partes: la parte antigua del habla y un poco la estética y armamento de su barco y la parte moderna que de resume en saqueos, y provocar la ruptura de tratados internacionales, aparte de darnos trabajo a nosotros. Espero que hayan salvado al secretario de la ONU.

¡Joder! Si es verdad que no debo estar pensando mientras estoy luchando, menudo corte me he llevado, tiene una espada bien afilada, me ha rajado una parte del brazo, pobre mi traje, mancillado por un pirata.

-¡Muere, bastardo, muere!

-Por favor, que estamos en el siglo XXI, la Edad Moderna ya pasó.

El barco tambalea, ha entrado más agua, este galeón moderno y metálico no puede con todo por lo que se ve, y además se está inclinando hacia donde estamos, mierda, mierda, arriba.

No te sorprendas, me huyó para que la altura me de ventaja y en la zona del timón tendré altura de sobra, ven pirata de pacotilla, ven ¡Te espero!

-¡No huyas perro cobarde!

Seguimos sin estar en la Edad Moderna, pero ojalá estuviera en ella para ir a la isla de Tortuga, ahí sí que habría gente de mi categoría, jaja, sería un reto salir de allí vivo y hacerme un nombre.

Por ahora solo estoy esquivando y beneficiándome del hundimiento, pero ya es hora de sacar está espada tan increíble que he diseñado en la CIA, de hecho, me la voy a incorporar en el traje, haré un bolsillo atrás por la espalda como si fuera un carcaj y allí la guardaré, bueno el diseño ya lo pensaré mejor, pero en la espalda sí que va a estar.

El banco se hunde rápido, no me esperaba tanta rapidez, con ahogarle sobra, pero quiero asegurarme.

-Johnson, Johnson, ¿Me recibes?

-Te escucho.

-El secretario de la ONU está a salvo en nuestro barco y la mayoría de la tripulación del Capitán también está muerta.

-¿Cómo que la mayoría?

-No hemos dado a basto, la vida del secretario era más importante.

-Quitarme gente también, ¡bastante tengo con este anacronismo andante!

-Se corta la señal, ten cuidado, nos vemos luego.

Eso, huye Smith huye, porque la señal está perfectamente, y si no muero yo ahogado, nos veremos luego.

-Venga pirata, TE ESPEROO -me encanta gritarle a este hombre, se pica mucho, provocarlo es muy satisfactorio, además si no piensa puede jugar a todo a mí favor.

Ya viene, hora de desenfundar la espada, maravillosa, totalmente negra y con una raya verde, me ha costado hacerla pero esta katana es de las mejores del mundo seguro.

PAUSADA El mercenario Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon