Seduciendo Un Alfa |NamJin|

43: Hay belleza en los desastres.

La noche del sábado finalmente llegó, y con ella, la esperada fiesta de finalización del rodaje de la película. El club privado donde se llevó a cabo la celebración estaba decorado con luces brillantes y coloridas que creaban una atmósfera eufórica en el aire.

SeokJin y Yang Sejong se encontraban en el escenario, listos para dar su discurso de agradecimiento junto al CEO de la compañía y la directora por el arduo trabajo de todos en el proyecto.

Aunque la directora seguía siendo exigente con él y lo hizo trabajar más duro en los últimos días, sin permitir un solo error de su parte, SeokJin había aprendido a tolerarla y trabajar a su propio ritmo. Afortunadamente, ella no insistió tanto como al principio de las grabaciones, y tampoco interfirió mucho en su trabajo, por lo que habían estado llevando la fiesta en paz.

En los últimos días se había estado sintiendo emocionado y expectante por esta noche y eso le ayudó a mantener su mente ocupada. Evitó por todos los medios pensar demasiado en que Kim NamJoon era uno de los principales inversionistas de la película. Y que, aún si no asistía por SeokJin, tendría una invitación asegurada a la fiesta.

SeokJin ajustó el micrófono y miró a la multitud con una sonrisa en el rostro antes de comenzar a hablar. Había preparado un breve guión para el momento y sus palabras fluyeron con naturalidad. Sin embargo, al concluir su discurso y recibir los aplausos, sus ojos se desviaron por las mesas.

Inconscientemente, todavía esperaba verlo ahí.

SeokJin escudriñó la multitud con la inquietud de encontrar la figura conocida y alta de Kim NamJoon. Sin embargo, a medida que su mirada se deslizaba de una mesa a otra, comenzó a notar que la figura de ese alfa brillaba por su ausencia. No estaba allí entre los invitados, y SeokJin no pudo evitar sentir una mezcla de decepción y confusión. ¿Dónde estaba NamJoon en un evento que él, como uno de los principales patrocinadores, seguramente tendría que asistir?

A pesar de la sensación de aflicción que pesaba en su pecho, SeokJin se esforzó por mantener su sonrisa y actitud positiva. Sabía que no podía permitir que la ausencia de ese alfa afectara su noche. En esos días, había hecho lo imposible por dejarlo a un lado de su mente con el único propósito de ser igual que siempre, al menos por esa noche.

Con unas últimas palabras, cedió el micrófono a Yang Sejong, quien continuó con su discurso de agradecimiento.

Después de los discursos, el ambiente festivo de la celebración continuó y SeokJin se encontró rodeado por miembros del staff, invitados e incluso patrocinadores. Se movió entre ellos como una mariposa social, conversando, coqueteando y sonriendo en todo momento. Se permitió disfrutar del momento, ser el mismo SeokJin de hace medio año atrás: desvergonzado, presuntuoso, superficial y divertido, consciente de que esa faceta no duraría para siempre.

En los últimos días, el tiempo había avanzado lentamente, pero logró evitar pensar en NamJoon cada pocos segundos, lo cual fue un pequeño alivio. También había logrado extender esos intervalos a diez minutos o más antes de que el alfa volviera a invadir su mente, lo que lo hizo sentir más capaz.

Para la semana próxima, se propuso como meta dejar de pensar en NamJoon durante una hora completa. La semana siguiente, aspiraba a un día completo sin que el alfa ocupara sus pensamientos. Y cuando menos se lo esperara, ya no pensaría más en ese hombre, y podría volver a ser su yo habitual, sin la presencia constante de NamJoon en sus pensamientos.

Ya no lo vería en sus sueños, ni en sus pesadillas.

La sonrisa en los labios de SeokJin titubeó y un sentimiento aprensivo se instaló en su pecho. Pensar en olvidar a NamJoon era lo más doloroso. Por un momento, observó todo a su alrededor y volvió a experimentar esa sensación de desconexión ante lo que lo rodeaba que lo hacía sentir abrumado. Era una suerte que Kang Jooha no estuviera allí para ver cómo se cohibía ante la atención de la que tanto solía disfrutar. El otro omega lo había estado acosando y burlándose de él cada vez que se encontraban. Afortunadamente, a Jooha parecía gustarle estar al aire libre y él, junto con todo su grupo de amigos y otros miembros del equipo, se quedaron en la terraza del club alrededor de la piscina.