꧁𝐃𝐫𝐚𝐠𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐀𝐫𝐝𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨꧂|ʜᴏᴛᴅ

𝑵𝒖𝒆𝒗𝒐𝒔 𝑹𝒆𝒚𝒆𝒔 𝒚 𝑹𝒆𝒊𝒏𝒂𝒔:

Una mujer platinada se encontraba frente a unas puertas de madera cerradas, dudando si tocar o no, estaba demasiado nerviosa, no sabía aún que era lo que diría exactamente, pero sin duda tenía que decir algo de todo lo que había sucedido.

Los cuatro hijos de la Reina Alicent, se encontraban en los aposentos de su hermana, la Princesa Daenerys, pasando el tiempo comiendo algunos postres y charlando de diferentes cosas.

Escucharon que llamaban a las puertas, dando la autorización para pasar a quien fuera que estuviera del otro lado de la puerta, las puertas fueron abiertas revelando así a Rhaenyra.

—¡Dulces hermanos! Me disculpo por interrumpir, pero que bueno que los encuentro a todos juntos, quería charlar con todos  —la platinada mayor dijo, acercándose cada vez más a ellos.

—Hermana, que bueno que te nos unes, ven, siéntante —Helaena le indico con un gesto de mano que sentara junto a ellos.

Rhaenyra camino hasta sentarse al frente de todo ellos.

—¿De qué quieres hablarnos? ¿Paso algo con los preparativos para tu coronación? —Aemond se encontró preguntando a la Futura Heredera.

—No, todo va bien. Quería hablar con ustedes desde hace bastante tiempo, pero sucedió lo de padre y luego lo de Otto, así que no tuve la oportunidad.

Todos la miraban expectantes, esperando a que continuara con lo que sea que tenía que decirles. A pesar de que su relación se había vuelto un poco amena aún no era maravillosa, por eso aún no estaban acostumbrados a que Rhaenyra los buscara para otra cosa que no sea asuntos del Reino.

—Bueno. Me coronaran pronto y a pesar de que yo seré la Reina ustedes tendrán un puesto importante y de cierta manera también los coronaran, ¿no? —la platinada soltó un suspiro nervioso, apretó sus manos que descansaban en su regazo y continuo.

—Sé que nuestra relación no ha sido la mejor, pero somos hermanos y me gustaría que nuestra relación mejorara, más ahora que Reinaremos juntos, les ofrezco una disculpa por no haber estado para ustedes como hermana mayor en todo estos años, por no haberme comportado adecuadamente con ninguno de ustedes ni con su madre, por eso propongo que empecemos de nuevo, que tratemos de ser la familia que somos.

La habitación quedó en un profundo silencio una vez que la Futura Heredera acabo de hablar. Nadie sabía que hacer o que decir después de estas palabras, todo se volvió un poco incómodo.

—¡A mí me encantaría, intentémoslo! —Helaena dijo alegremente mientras extendía su mano para agarrar y darle un ligero apretón a la mano de su herma mayor.

—Bueno, también me gustaría eso. Estoy arta de las peleas innecesarias, cuando tenga hijos quiero que estén en un buen ambiente —Daenerys hablo, mirando a sus hermanas con dulzura.

Aemond se sonrojó levemente ante las últimas palabras de su prometida.

—No tengo problema, siempre y cuando tu esposo deje de ser grosero con nosotros y con mi madre —Aemond respondió uniéndose a la platica, con una mirada sería, pero serena en su rostro.

Aegon quien se había esta burlando en silencio por el ligero rubor de su hermano, tosió un poco mientras se aclaraba la garganta.

—Sí, bueno, supongo que lo pedemos hacer.

Todos se sonrieron alegremente. Continuaron comiendo sus postres mientas le ofrecían uno a Rhaenyra.