꧁𝐃𝐫𝐚𝐠𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐀𝐫𝐝𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨꧂|ʜᴏᴛᴅ

𝑷𝒆𝒍𝒆𝒂 𝑭𝒂𝒎𝒊𝒍𝒊𝒂𝒓:

Una pelirroja observaba con ternura el ramo de rosas rojas que le habían traído, había pedido un jarrón con agua para ponerlas, cuando tuvo el jarrón entre sus manos comenzó a poner las rosas con cuidado.

—El Rey me comento que le pediste que reconsiderara su decisión de dejar a Rhaenyra como la sucesora al trono —la Reina acabo de acomodar las rosas para voltear a ver al platinado que estaba detrás de ella.

—Es cierto —el platinado veía las rosas que le trajo a la Reina para luego posar su mirada en esta.

—Me pregunto si estaba de acuerdo contigo —Alicent camino hasta tomar asiento frente al sofá en el que estaba sentado el Príncipe.

—¿Estas de acuerdo? —la pelirroja lo miro fijamente con cierta duda en su mirada para después responder al platinado.

—Dime la verdad, ¿quieres usar a uno de mis hijos para llegar al trono? ¿acaso nos alejaste de la manipulación de mi padre para tú tomar su lugar? —Daeron le dio a la Reina una mirada dolida.

—¿Crees que soy capaz de algo así? ¿Es esa la imagen que tienes de mí, Alicent? —esta soltó un suspiro, retiro su mirada del platinado para dirigirla a sus manos.

—No, no pienso que seas ese tipo de persona Daeron, sé que has hecho mucho por mis hijos y por mí, pero en este punto no sé que es lo que planeas, no quiero poner a mis hijos en peligro — el Príncipe se paró para ir al lado de la pelirroja, poso una de sus manos sobre las manos de esta y la otra la uso para levantar su barbilla.

—Mírame, eso no va a pasar, nunca dejaría que les pasara algo, ni a ellos ni a ti, daría mi vida por cualquiera de ustedes —Alicent lo miraba mientras contenía algunas lágrimas en sus ojos, para después darle una dulce sonrisa.

Era un día tranquilo en la Fortaleza Roja, pero esa tranquilidad no duro mucho cuando toda la familia de la futura heredera se reunió en la sala de consejo.

Todos estaban sentados mientras esperaban saber por qué el Príncipe Daeron los cito a todos ahí.

—¿Para qué nos mandaste a llamar? —cuestiono Daemon.

—Los llame aquí para hacerles saber algo que el Rey a estado pensando y por ordenes de él les dire —Daeron miro a cada uno de los presentes antes de continuar hablando.

—El Rey se a estado cuestionando su desisión de dajar a Rhaenyra como su sucesora —se vio interrupido por Daemon.

—¡Que demonios dices! —fue lo único que dijo el platinado mientras miraba de manera molesta a su hermano.

—¿Por qué mi padre de repente se cuestiona su desisión? ¿Qué lo hizo cambiar de opinión? —pregunto Rhaenyra un poco en shock por lo anunciado.

—¿O quién? —cuestiono con sospecha Daemon mirando a su hermano.

Daeron igniro la clara acusación de Daemon para responderle a su sobrina.