Rey de mi corazón | IruAzz (traducciónEs)

Capítulo 23: ¡Alerta! ¡Se ha descubierto un problema!

La Manada Anormal reía y discutía mientras caminaba por el pasillo hacia su siguiente clase. Hace poco les han renovado sus contratos familiares y no podrían estar más contentos. Especialmente, Kerori, cuya hermana fue la mejor alumna de su curso. No ha dejado de presumir de ello, como si fuera un logro suyo. Pero, aun así, Chima había conseguido un rango Gimel y la Manada Anormal estaba muy orgullosa de ella.

―Por cierto, Iruma, Chima-chan y Silvia-chan solicitaron nuestra Battora―, intervino Jazz, su voz se coló entre las conversaciones de los demás.

― ¿Es eso posible? Creía que todos los de primer año tenían que esperar―, preguntó Iruma confundido.

―Normalmente sí, pero consiguieron un permiso especial del director―, se rio Jazz.

―Abuelo...― Murmuró Iruma desolado.

― ¡Esa es mi hermana! ― la vitoreó Sabro.

― Astuto... Creo que han pasado demasiado tiempo con nuestra manada―, suspiró Kerori, pero todo el mundo pudo darse cuenta de lo orgullosa que estaba por su sonrisa.

― Nice-chi! ― animó Clara.

―Fue una decisión inteligente, después de toda la publicidad que recibimos no me sorprendería que nos inundaran con solicitudes―, pensó Alice en voz alta. ―Especialmente, después de que trasladáramos nuestra Battora al Real―.

―Necesitamos el poder de los demonios, ya que estamos planeando ampliar nuestro negocio―, Jazz meditó.

―Acéptalos a las dos, son familia―, respondió Iruma, haciendo que Kerori y Sabro le sonrieran.

― ¿Estás bien? ― Soi ralentizó el paso para caminar codo con codo con Iruma y Alice, Clara volvía a jugar a uno de sus juegos favoritos: subirse a Sabro Sabnock. ―Desde que conocimos a los nuevos profesores has estado actuando raro, y no tiene nada que ver con nuestro próximo examen promocional―.

―Lo sé... Ali-san me dijo que alguien se metió con mi mente―, las palabras de Iruma, hicieron que Alice y Soi se detuvieran. Se giraron para mirarle con horror en los ojos. ―Fue antes de... ya sabes qué, durante el incidente del Parque Walter. Se suponía que conocía a la profesora, pero por alguna razón no la conozco. Ali-san descubrió que me habían quitado de la mente el recuerdo de ella―.

― ¿Una habilidad de sangre que controla la mente?― Alice susurró con dureza. ― ¡No puedo creerlo! ―

―El abuelo cree que tiene que ver con la fuga de la prisión de entonces y los Seis Dedos―, les informó Iruma. ―Soi me gustaría que tu clan intentara encontrar alguna información sobre ellos, sobre una habilidad de sangre que pudiera ser capaz de hacer algo así―.

―Por supuesto, señor―, se enderezó Soi y respondió honorablemente.

―Gracias―, suspiró Iruma. ―Será mejor que nos vayamos o el resto se preocupará―, reanudaron la marcha. ― Cuídense los dos, no creo que yo haya sido el único al que le han desordenado la mente. Debe haber una razón por la que ninguno de los Seis Dedos pudo ser reconocido por nadie―. Alice y Soi hicieron una mueca, no les gustaba nada esta situación. ―Informaré al resto de la manada más tarde hoy en la mansión, pero por ahora vamos a mantener esto en secreto. No creo que sean capaces de enfrentarse a.... nuestros maestros sin revelar algo sin la preparación adecuada―.

―Así es, tenemos su clase a continuación―, Soi frunció los labios.

― ¿Cuál es tu plan para la Prueba de Ascenso de los Rompecorazones? ―. inquirió Alice, tratando de aliviar el ambiente que los rodeaba- No funcionará si se dan por vencidos de que algo anda mal tan pronto.

―Nada, cada uno tenemos que demostrar a todos que somos dignos de lo que hemos conseguido―, respondió Iruma con una sonrisa. ―Esta prueba no está hecha para que la ganemos, ¡nos enfrentamos a nuestros maestros! ¡A todos ellos! ¡O al menos a la mayoría de ellos! Tendremos que aguantar lo máximo que podamos y demostrar nuestros talentos. No hay de qué preocuparse, al fin y al cabo, nos hemos ganado el puesto―.

― ¿Crees que degradarán a alguien o le subirán el rango? ―. preguntó Soi con curiosidad, ya que en su mayor parte las predicciones de su alfa habían dado en el clavo.

―Alice me acompañará en el rango Vav―, sonrió Iruma a su omega sonrojado y acicalado. ―Nadie será degradado... siempre y cuando no vayan a la prueba creyendo que han ganado. Tendrán que jugar con inteligencia y astucia, si no son astutos, deben ser mañosos al respecto. En cuanto a que otra persona suba de rango―, los ojos de Iruma brillaron en rojo durante un segundo. Alice y Soi se dieron cuenta entonces de que Iruma estaba haciendo que Ali-san analizara las posibilidades de su manada en su próxima prueba. Ali-san se había convertido en un superordenador, uno de esos de las historias de ciencia ficción del mundo de Iruma. ―Los del rango Daleth subirán a un rango He, pero tendrán que ir a por todas―.

― ¡Bien! ― Soi sonrió complacido por la noticia.

― ¡Fantástico! ― Alice aplaudió feliz.

Sus sonrisas se convirtieron en ceños fruncidos cuando se detuvieron ante el aula de los nuevos profesores. Si es que podían llamarse así.

―Allá vamos―, Iruma respiró hondo. ―Vamos a hacerlo―.

― ¡Sí, alfa! ― Respondieron sus compañeros de manada.

Todos juntos cruzaron la puerta hacia su próxima aventura.

- Mientras tanto, en la sala de profesores -

― ¡Sinceramente! ¿Qué debemos hacer con la Prueba de Ascenso de la Manada Anormal? ― La pregunta de uno de los profesores hizo que toda la sala se detuviera, antes de que el caos invadiera la sala.

― ¡Sinceramente! ¡Están locos! ―

― ¡Nosotros éramos así de malos cuando éramos estudiantes!―.

― ¡Seguro que no son normales! No podemos meterlos en el mismo saco que el resto de los alumnos―.

― ¡Seguro! Del rango Daleth al Vav... ¡acaban de empezar su segundo año! ¡Necesitas un Rango Daleth para graduarte en esta escuela y ellos ya lo poseen! ―

―Quiero decir, son los Héroes del Parque Walter, ganaron el Festival de la Cosecha y de la Música... ¡por no mencionar a Iruma! ¡Él es todo un monstruo por sí mismo! ―

― ¡Ellos tienen el Royal One! ―

― ¡He oído el rumor de que Kerori tiene como 60 esclavos! ―

― ¡¿En serio?!―

― ¡Oí que Alice quemó un aula el otro día!―

― ¡¿Otra?!―

― ¡Escuché que Jazz está pensando en expandir sus negocios fuera de nuestro reino! ―

― ¡Eso es una Battora de escuela, no un negocio! ¡¿En el nombre de Delkira?!

― ¡Están fuera de control! ―

―Se están volviendo arrogantes―, eso hizo que el resto de la sala se detuviera de nuevo.

―Tienes razón―, esta vez se dijo en un tono mucho más calmado. El ritmo de toda la sala pareció ralentizarse. ―No paran de posar para todas las fotografías―.

―El número de aspirantes a entrar en esta escuela nunca ha sido tan alto―, comentó otro profesor. ―La mayoría decían cosas como: 'Quiero conocer a la Manada Anormal'―.

―Incluso la ceremonia de ingreso también estuvo animada―.

― ¡Esto es un problema! ¡Babyls es un lugar para criar demonios nobles! Por lo tanto, como maestros, tenemos el deber de romperles los cuernos y guiarlos por el camino correcto―, sonrieron maliciosamente los demonios. ―Enseñemos a esos héroes ebrios de victoria el sabor de la derrota aplastante. Seremos... ¡los Bribones Formidables! ―.

En otros tiempos, habrían sido los jóvenes estudiantes los que habrían tenido que vigilar sus espaldas y rezar por un milagro. Esta vez, serán los profesores los que reciban una sorpresa impactante.

Kalego sonrió entre las sombras, soltando una risa espeluznante al imaginar las caras de sus compañeros cuando descubran que derrotar a la Manada Anormal no será tan fácil como esperan.