Capítulo 27

95.8K 5.8K 359
                                    

Suspiro y froto mi frente antes de devolverle la mirada.

—¿Por qué estás aquí? Y me refiero a, de verdad, no tienes nada que hacer aquí, y mucho menos intentar amenazar a mi hermano. —Finalmente rompo el silencio, comenzando a sacar un poco de mi frustración—. Ni siquiera preguntaré qué hay mal contigo, porque tengo esa respuesta desde el principio.

Mis palabras no parecen gustarle, ya que su ceño fruncido se profundiza más, pero no es como si me importara… del todo.

—River, ¿tú por qué crees que estoy aquí? —Ignora todas mis palabras y solo se concentra en mi pregunta, dando un paso más cerca de mí—. Cuando me levanté por la mañana, lo primero que Matt me dice es que te fuiste, y Troch… ¡Mierda, Troch! —Una burbuja de risa escapa de sus labios—. Me habla como si quisiera apuñalarme. —Pasa sus manos por su cabello, despeinándose un poco, pero aún así viéndose increíblemente bien; luce desesperado y molesto, pero aún así pareciera querer mantenerse cauteloso—. ¡Dijiste que te quedarías! Y menos de veinticuatro horas después ya no estás allí…

—Espera un momento —lo interrumpo, tomando un paso adelante y dándole mi mejor mirada intimidante—. En ningún momento dije que me quedaría, y te consta, solo fue una suposición. —Aunque claramente todo parecía quedar implícito en ese momento, tengo un punto a mi favor en esto—. Y, de verdad, Eslay, ¿por qué crees que me fui? Era pasada la media noche, no es como si hubiera querido irme en ese momento solo porque sí.

Eslay no parece estar muy enterado de lo que, según yo, hizo mal. Y probablemente no esté mal, y yo en mi cabeza haya montado una especie de escenario donde, porque yo tengo sentimientos por él, él también los tendrá por mí, y no es así. A Eslay le parezco atractiva, hemos follado un par de veces, pero… La atracción es muy diferente a sentir algo por alguien.

—¿Te refieres a Bea? —pregunta, dando otro paso hacia mí, no dejando casi espacio entre los dos—. ¿Es por ella que te fuiste, porque me viste besándola?

Lo miro con molestia, porque pareciera que está disfrutando de la situación.

—¿Estás celosa?

—Cierra la boca. —Trato de concentrarme en otra cosa, ajustando el cinturón de la bata—. ¿Cuál es el problema si sí?

Por un momento sonríe, pero finalmente es como si se diera cuenta de algo, y entonces vuelve a su semblante serio. Hace el intento de llevar sus manos hacia las mías, pero las termino escondiendo, infantilmente, detrás de mí.

—Puedo explicarlo…

—Las excusas basura de los hombres siempre empiezan de esa manera. ¡Claro que no puedes explicarlo! Y ni siquiera sé si tienes qué. —Ahora me siento frustrada y molesta conmigo misma. Me siento en el borde de la cama y dejo caer mi rostro entre mis manos por un momento—. Soy la madre de tu hijo, y eso es todo.

—River, de verdad hay una explicación —comienza ignorando mis palabras, y llevando una mano hacia mi mentón para hacerme verlo—. ¿Qué tan raro sonaría si te digo que estaba drogado? Ella puso una droga en mi bebida, y…

Aparto su mano y me pongo de pie, interrumpiéndolo—: ¿Me estás diciendo que una mujer te puso a ti, el pakhan, una droga en tu bebida porque es tan fácil?

Claramente estoy siendo sarcástica, ¿pero por qué quiero tantas explicaciones, de cualquier manera?

—Créeme, no lo esperaba de ella… Sin embargo, ese asunto está resuelto.

—¿A qué te refieres con que está resuelto? —lo cuestiono, poniendo una mueca de confusión, aunque hay un leve presentimiento dentro de mí—. Eslay, ¿qué hiciste con ella?

De un Mafioso | Clan Crawford #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora