Atreverse a atreverse

El cumpleaños

-¿Qué pasa hija? ¿Por qué tienes esa cara?

-Te está llamando ese señor...

-¿Quién?

-Mi papá... ¿Por qué te esta llamando?

Marcia se quedó totalmente tensa, llena de los nervios, no sabía ni qué decir...

-La verdad no sé, no tengo ni idea...

Lucía procede a contestar la llamada.

-Bueno, ¡Hablas con Lucía! ¿Qué se te ofrece?

-¿Lucía? -totalmente extrañado-... Ah, yo... yo solo quería hablar un asunto con tu mamá.
Pero no te preocupes, después la llamo.

Esteban cortó la llamada y automáticamente pensó...

-Creo que metí a Marcia en problemas.

-Bueno, bueno -dice Lucía-.

Marcia estaba ansiosa y se quedaba viendo a Lucía como tratando de sacarle las palabras.

-¿Qué pasó Lucía?

-Nada, cuando le pregunté me dijo que quería hablar contigo un asunto y me cortó la llamada... ¿A qué asunto se refiere?

-¿Un asunto? No sé a que se refiere...

Marcia trataba de disimular sus nervios  haciendose la desentendida y procedió a quitarle el celular a Lucía.

-Y... ¿Para que me necesitabas hija?

-Ah, para que me ayudaras a eligir  el outfit que voy a usar mañana porque tengo una exposición de fotografía.

-Bueno, a ver... ¿Dónde está?

-Vamos a mi habitación...

Después de ayudar a Lucía a escoger su outfit Marcia regresó a su habitación pero, estaba un poco intranquila ya que no sabía la verdadera razón de la llamada de Esteban.

Así que decidió llamarlo y se fue para el baño.

Esteban por su parte estaba intranquilo porque se sentía culpable de arriesgar a Marcia ante sus hijos.
Tampoco se atrevía a llamarla de nuevo para ver qué había pasado porque no quería que volviera a pasar lo mismo.

De repente, Esteban escucha su celular timbrar y decía "Marcia". Rápidamente decide contestarle.

-¿Marcia?

-Sí, con ella hablas...

-¡Perdoname!
Lo menos que quería era causarte problemas, jamás me imaginé que contestaría Lucía. ¿Pasó algo? -totalmente deseperado-

- No, afortunadamente no pasó nada. Pero le dijiste que me estabas llamando porque tenías que hablar un asunto conmigo... ¿Es verdad?

-No, eso lo dije para sacar una excusa.

-¿Entonces..?

-Pasa que no hay día que no te piense, Marcia me tienes atrapado. Quiero verte, saber cómo estas, escuchar tu voz así sea por celular... La última vez que nos vimos fue maravilloso.

-¡Por Dios Esteban!
No hagas esto más difícil...

-Más dificil porque así tú lo quieres. Yo sé que te mueres de ganas de estar conmigo al igual que yo. Pero, yo te dije que no te iba a presionar, las cosas van a pasar como tu decidas.

-Bueno, ya te diste cuenta que estoy bien y... ¿Tú?

-Yo... a ver... ¿Qué cómo estoy?
Pues, más enamorado que nunca de una hermosa abogada que no me quiere hacer caso, aunque no pierdo las esperanzas. Pero me reservo el nombre...