Capítulo 19

52.7K 2.9K 257
                                    

Rafaella.

Máximo me ha estado insistiendo desde la mañana que vaya a su departamento, así que cuando concluye mi reunión con el jefe de obra del nuevo hotel, me dirijo a verlo.

Llego a su edificio y el señor que está en recepción me indica que puedo subir.

Las puertas del ascensor se abren e ingreso a su piso.

-¿Me necesitabas para algo?-le digo acercándome.

Me mira lujurioso cuando ve que llego una falda negra y un polo blanco. Esta recostado en la parte trasera de su sillón esperándome. Aun con tacones me veo pequeña ante su tamaño.

-Bonitas piernas.-me dice mirándome como si quisiera devorarme.

-Gracias.-digo asintiendo con la cabeza.

-Se ven mejor cuando están rodeando mi cintura.-dice seguro y arrogante.

Llego a él y me paro recta.

-¿Solo me llamabas para alabarme?-digo levantando una ceja.

Con su brazo me rodea por la cintura y me pega a su pecho, apoderándose de mi boca. Rodeo su cuello con mis brazos y hundo mis manos en su cabello.

-Me gustas, Riccardi.-me sorprende que sea tan directo.

-Que lastima que tú a mí no.-lo miro concentrada en su rostro.

Le estoy mintiendo. Nunca me había atrevido a hacer tantas cosas por alguien como lo estoy haciendo por él.

-¿Quieres que te demuestre que si?-me amenaza apretando mi culo.

-No dejare que te abras las heridas y dañes mis perfectas costuras.

-No me interesa abrirme las heridas por ti.

-No te pienso volver a curar.

-¿Entonces qué haremos?-quiere saber.

-Puedo preparar algo de comer.-pienso en voz alta.-Mejor no.-digo dudosa.

Solo preparo comida para las personas que quiero y él no está incluido en esa lista de individuos.

-¿Sabes cocinar?-frunce las cejas.

-Sí, no soy una inútil. Aunque me salen mejor los postres.

-Prepárame uno.-me pide.

-No, mejor pidamos algo para comer aquí.-le pido.

-No. No pediré nada. Quiero probar lo que tú hagas.

-Dudo que tengas las cosas que necesito aquí. Son de repostería.-le indico.

-Vamos a un Supermercado y compramos lo que necesites.-se pone de pie.

-¿Iremos juntos?-pregunto extrañada.-Estas herido, no puedes salir así.

-Si.-dice respondiendo solo a la primera pregunta que le realice.

-Nos pueden ver, eso no sería bueno.

-Eso me tiene sin cuidado.-dudo en seguirle el paso cuando se dirige a su habitación.-Que se jodan si no les gusta.

-No quiero tener problemas ni generártelos.

Me mira sin dudar y toma mi mano haciéndome salir de su edificio. Tomo mi lugar en el asiento de copiloto y en toma el control del auto.

Entramos al supermercado y tomo mi distancia para evitar que las cosas se salgan de control y nos saquen una foto en una situación que se pueda malinterpretar.

Me toma de la mano haciéndome girar sobre mis talones.

-¿Huyes de mí?-entrelaza sus dedos con los míos.

IMPERIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora