Capítulo 4: la fiesta.

771 60 9
                                    

Cuando me cambié de casa perdí gran contacto con mis amigos de California. Ni cartas ni visitas. La mayor parte de mi tiempo allá  fue  con bonnie y roció grandes mujeres. Y por fin después de tanto tiempo me entero que sus padres decidieron mudarse a Hawkins con sus dos hijas. La verdad nunca quise preguntar el más allá pero creo que no son del mismo padre. Ellas siempre bromean con eso. Si fuera mi situación no bromearía con eso pero ellas todo lo toman en broma. Camino en dirección a la entrada de aquella casa. Al estar parada en la puerta me regresan recuerdos de nosotras tres en  California. La arena entremedio de conversaciones sin sentido y con su sentido del humor que cualquier persona que no las conozca tanto como yo se hartarían de ellas.

No e tocado el timbre cuando siento que gritan mi nombre y al voltearme las encuentro.  Una peli negra con bastantes pecas y muy pequeña para su edad me abre los brazos y corre demasiado rápido. Sonrío para mis adentros ya que rocío  la ve con una cara de disgusto algo que recuerdo de ella no le gusta la muestra de afecto. Bonnie llega a mi rodeándome en un abrazo muy apretado.

-Dios te extrañe demasiado , se supone  que nos vendrías a visitar. Pero Hawkins te reservo para el nomás.- la alejo para poder respirar y observarla.

- si lo sé , pero ¿están aquí no ?.- ella sonríe y vuelve a rodearme en un abrazo.

- Okey ya déjala la vas a matar.- Rocío la aleja de mi y le agradezco con la mirada.

Espero algún abrazo de ella pero lo que  me espera es una sonrisa de oreja a oreja. No , la verdad no esperaba más de ella.

- ¿Entonces ?  Nos tienes que contar muchas cosas. Queremos el chisme completo.- estalló a carcajadas. Y comprendo que  casi todo volvió a la normalidad. Estaban ellas y una parte de mí siempre estuvo en California .

después de un rato poniéndolas al corriente abandono  su casa para dirigirme a la mía. Dustin y yo iríamos a una fiesta con steve y robin creo que estarían los demás allá.  

El día que ocurrió lo de Eddie steve estaba completamente raro como si escondiera algo.
Al llegar a su casa estaba tan rojo como un tomate y se notaba muy nervioso. No le presté mucha atención en aquel entonces. Pero después dustin me contó que él está negando sus invitaciones a salir y que ya casi no hablan , cosa que es demasiado rara. Steve siempre anda detrás de dustin en todo.

Al llegar a mi casa camino hasta mi habitación no sé qué me pondré hoy creo que optaré por probarme cosas.

Un lindo vestido rojo con flores blancas adorna mi cuerpo. Se me ve bastante bien. No me decido por cuáles zapatillas creo que las blancas. ¿Eddie estaría en esa fiesta? El muy idiota se habrá preguntado porque me fui.

Sonrío sin pensarlo.

El recuerdo de aquel beso pasa como una estrella fugaz por mi memoria y me hace recordar él como me hizo sentir. ¿Podré besarlo otra vez? El me corresponderá igual que esa vez. Eddie había estado en mi memoria desde el día de lo sucedido. Lo había evitado por bastante tiempo. No asistí a tres clases de matemáticas y en los recesos evitaba su mirada. Era una persona persistente no dejaba de observar todo lo que hacía , con quien hablaba pero no se me acercaba. Porque no se me acerca. ¿Tan malo estuvo ?

Salgo de mis pensamientos observándome al espejo. Estoy baja en mi peso y eso se debe a muchas cosas. Mi cabello castaño oscuro llega hasta  mi cintura. Las ondas se vuelven perfectas pasando los hombros. Eso me hace pensar en el castaño él se fijo en mi cabello. Subo mi mirada hasta mi rostro y capto mis pecas. Son demasiadas como para contarlas.

       
- ¿entonces me estás diciendo que tus Amigas de California se mudaron aquí?.- lo observo  moviendo mi cabeza de arriba abajo.
-¿y porque?!.- volteo a verlo. como carajos voy a saber el porque. Se escucha enojado.

MÍRAME: Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora