Donghyuck recibió una extraña carta que lo hace moverse a otra dimensión. Recibe dinero para matar a un "héroe corrupto" y sin pensar, Haechan, el mercenario bocón, acepta.
En mundo al que va existen los súper héroes, Haechan encuentra a su objetiv...
Cuando la vida le diera la espalda, Mark le prometió estar en su puerta, si necesitaba ayuda, Mark se encargaría de apagar las luces de la ciudad. Mark decía que podría mentir, engañar, rogar y sobornar con tal de que Haechan estuviera bien.
Cuando los enemigos estuvieran en la puerta de Mark, Hyuck los llevaría lejos de la guerra, si Mark necesitaba ayuda y su esperanza colgaba de un hilo, Haechan compartiría su sufrimiento para que Mark estuviera bien.
Le daban al otro razones para creer, porque sabían que el otro mismo.
Mark observaba el féretro de Haechan, prometiendo que seguiría adelante y que lo amaría incluso si Haechan se iba, que viviría por él.
Haechan mientras caía pensaba que, si caía como una estatua, Spiderman estaría allí para atraparlo y para ponerlo de pie.
Para Mark, Haechan era su columna vertebral, su piedra angular. Para Donghyuck, Mark era su muleta cuando sus piernas dejaban de moverse. Haechan estaba enamorado de el gran corazón que tenía Mark y Mark se sentía vivo con la vibrante energía de Donghyuck, era el pulso que siempre había necesitado.*
—¿Por qué viniste? —preguntó Mark observando a Jeno.
—Creí que me necesitarían, Doyoung estaba convenciendo a Jaemin de ayudarle, y no sé, no quiero que termine mal. —Jeno levantó los hombros.
Haechan se quedó callado, le gustaba la idea de que Jeno pudiera amar a Jaemin, ya que al parecer le quitaron la memoria de la persona por la que quiso dejar de matar. También podía entenderlo, Haechan no era un héroe, era solo el hombre enamorado de un gran héroe.
—Derrotaremos a Mephisto. —Dijo Mark mientras tomaba un poco de aire y seguía subiendo las escaleras para llegar al techo del hospital.
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Mephisto se estaba divirtiendo con Venom, tenía potencial, pero aún así no servía siquiera para un calentamiento. Xiaojun estaba enojado porque su periódico muchas veces le compró fotografías a Johnny, ¿Cuál era la obsesión de ese hombre para causar tanto daño?
—Basta. —Mephisto chasqueó sus dedos. —Tu alma me pertenece, Xiaojun, ¿Acaso lo has olvidado?
Xiaojun se detuvo y miró al villano.
—Jamás hice un trato...
—Lo hiciste, aunque debiste ser más específico. "Quiero volver a ver a Donghyuck", le llorabas a un cuerpo inerte, bueno a lo poco que quedaba de él. Tú y Mark son demasiado parecidos. —Mephisto chasqueó la lengua.
No entendía a los humanos, no entendía a los héroes, no entendía por qué las personas debían relacionarse con otras personas. No entendía cosas tan simples como el amor, porque no tenían sentido. ¿Dar todo por alguien? ¿Luchar y permanecer juntos por siempre?
Era un ciclo, la vida lo era, pero las personas eran tontas y no lo respetaban, cada persona tenía un momento y tiempo en la vida de otra. ¿Por qué se aferraban?
