CAPÍTULO 46

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Actualización un jueves, porque soy buena samaritana... Que x ahí andan diciendo que no tengo corazón TwT

LOGAN
Madrugada del lunes, primero de noviembre de 2021

El ardor en la nariz delató mis ganas de llorar.

—¿Y te sorprende? —preguntó una chica a su amiga.

—Bueno sí —respondió la otra—. Lo de que se den entre ellos, claro que no, era obvio que tenían algo; pero lo de «P de Perdedor» si que no me lo imaginé. O sea, Silver fue el rostro de la campaña contra el bullying que impulsó Padua después de la muerte de Emily.

—Hipócrita —comentó alguien más.

—Lo único que le deseo es que pasé por lo que pasamos los «P» que ella misma marcó.

Me sentí aturdido.

La gente conversaba en voz alta, descargando su enfado, sorpresa o, en el peor de los casos, su satisfacción. No había visto tanta ira desde que el video de Nelson fue publicado. Ese día Silver peleó con Aymé, pero las cosas no llegaron a más porque la líder de las porristas era una sola, pero ahora toda la escuela estaba en contra de Silver y, conociendo lo que todos pensaban sobre los González, ella no la pasaría bien.

«No es tu problema», intenté convencerme.

Algo en mí se resquebrajó. Lucien me había dicho mil veces que ella era la culpable, pero no le creí. Decidí confiar en ella y darle mi corazón para que lo destrozara.

—A ver, ya terminó el show. —La voz de Alex hizo eco en el salón, se había subido en la mesa del DJ con un micrófono en las manos—. ¡La noche es joven y la fiesta continúa!

Las voces quedaron apagadas por la música y las nítidas y parpadeantes luces regresaron.

Alex atravesó la turba de gente hasta Mina.

—Gracias —articuló ella, inaudible, y le entregó un pequeño control remoto, el que había usado para controlar las proyecciones.

Alex lo guardó, se volvió a la multitud y continuó con su tarea de animar la fiesta.

Mina dio media vuelta, cruzó el recibidor y salió al jardín delantero. Me apresuré a seguirla.

Ella tiró al suelo el teléfono que llevaba en la mano. Gritó y lo pisó hasta que la pantalla se quebró. Lo recogió y lo arrojó contra la pared. Lo piso una vez más y esa vez logró atravesarlo con el tacón de su zapato.

—Mina...

—¿Logan? —inquirió al verme e hizo un intento por secar sus mejillas.

—¿Por qué?

Ella rompió a llorar y se dejó caer al suelo.

—¿Por qué lo hiciste? —reiteré.

—Emily fue la primera persona que Silver marcó —dijo al cabo de un buen rato en silencio—. Pasó por cosas que no te imaginas. Los Boffalos y el equipo de Taekwondo hicieron su vida miserable, las gemelas Martínez la humillaron, Nelson se aprovechó de ella y Shaw y Milo la violaron.

La escuché, atento.

—Era mi mejor amiga. —Golpeó el suelo con los puños, más lágrimas brotaron de sus ojos.

Intenté mantener la boca cerrada, pero no lo conseguí.

—Mentirosa —espeté—. Eres una mentirosa.

P de PERDEDORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora