Silent Love- Edward Cullen

"Salvando"

Mi papá llevo la porción de pizza a su boca y la disgustó con placer.

Antes de irme de la casa de mi novio la señora Cullen me dio un tupper muy grande con la pizza que había sobrado de esa misma tarde.

Casi muero de vergüenza al darme cuenta que con este tupper ya eran dos recipientes que estarían en mi casa sin devolver, eso era completamente vergonzoso.

-Asi que tienes novio-.

Asenti con una sonrisa leve, mientras agarraba un pedazo de pizza recalentada.

-Y no me contaste-.

Hice una mueca.

-Queria hacerlo pero no encontraba el momento- le respondí.

Mi cabello húmedo caía sobre mis hombros, tenía puesto mi pijama más abrigadora porque la temperatura había bajado esa noche.

-Cierto, no hemos hablado mucho en estos días-.

Papá lleva su soda a la boca y le da un sorbo.

Lleva su suéter gris el cual usa entre casa cuando hace frío.

Ambos estamos sentados en el sillón enfrente del televisor, el cual esta reproduciendo friends, pero la verdad es que ninguno estaba muy pendiente.

-¿Como te va en el trabajo?-.

El se encoje de hombros.

-Nada oficial, no encuentro nada estable-.

Suspire.

- Papá, ya hablamos de esto, nunca te gustó trabajar de noche y mira tus ojeras, ya nisiquiera puedes disfrutar tu programa favorito porque estas trabajando de guardia de seguridad-.

La pizza en mi mano deja de llamarme la atención y la dejo en mi plato.

Papá gira más su cuerpo hacia mi y sigue comiendo su pizza sin prestarme atención.

Entrecerre mis ojos hacia el y apreté mis labios.

-Hablare con Richy mañana- decidí.

-¿Quien es Richy?-.

Papá parece desconcertado.

Deje el plato en la mesita enfrente del televisor.

-El chico que trabaja en el cine, vere si hay un puesto disponible para mi-. Respondi.

Papá deja su pizza en el plato.

Niega rápidamente.

-¡Oh no Blake! Ya te dije que no quiero que trabajes, no ahora, quiero que te preocupes por tus estudios, que vivas tu adolescencia, los problemas económicos son solo para adultos y tu eres mi responsabilidad-.

Mi ceño fruncido se aflojó.

Me acerqué más a él.

- Papá, escúchame, te veo más cansado cada día, no te veo al volver de la escuela porque siempre caes muerto de trabajar o no estás, eso no es vida papá, deja que te ayude a tomar un respiro de todo esto-.

Papá hace una mueca, sus ojos se relajan y su cara cae en completo cansancio.

Sigue en negación, lo sé.

Pero el luce tan cansado todo el tiempo, ya no puede ver una película conmigo porque a los diez minutos ya esta durmiendo y perdemos tiempo juntos.  Eso nos lastima a ambos.

-Ya hemos cortado la mitad de nuestros gastos y áun así tenemos que estirar el dinero para poder llegar al mes, solo será un tiempo papá, podrás dejar algunos de tus puestos para buscar uno de tiempo completo.