«Me enamore de un prostituto 3»

Capítulo 15

Amaba sus berrinches de bebe, pero no cuando no eran justificados con cosas acerca de mí que no he hecho por que no tendría que enojarse conmigo, que se enoje con mi ex que él me beso no yo.

Me castiga a mí, por algo que yo no quería ni hice y aparte le hago la cena y me hace este drama.

Jacob corre a la habitación y se encierra a llorar, yo corrí detrás de el para detenerle pero cuando llegue me azoto la puerta en la cara, trate de girar la perilla pero estaba trabada con seguro, no querría que entrara a nuestra habitación.

Me deslice en la puerta recargándome y me deje tirar al suelo, toque la puerta― amor... ábreme por favor hablemos te estoy diciendo que no lo amo, que te amo a ti y si quieres vamos a reclamarle que no se meta con nosotros vamos, amor yo no hice nada malo.

Estuve tirado en el suelo como por media hora, ya estaba casi cayéndome al suelo de sueño y quería entrar y acurrucarme con él, llenarle de besos, comérmelo a besos para que sepa que lo amo, porque es mi único amor.

Había pasado casi una hora y estaba tirado como perro hambriento, con sueño y con los ojos secos, ardientes de dolor por las lágrimas que se habían drenado de mis ojos.

No tenía la culpa yo porque estaba sufriendo por esto si Jacob no entendía que yo no lo bese me obligo me lo dio sin mi consentimiento ese beso no fue aceptado por mi parte.

Toque la puerta por última vez casi sin ningunas ganas de querer despertar nunca más, no podía con este dolor.

Se abrió lentamente la puerta para no lastimarme porque estaba a oscuras, y sentí un cuerpo arrodillándose ante mí y se inclinó para darme un beso en mis labios, sus ricos labios húmedos sabor a moras y mordió mi boca con ese toque picante que siempre llevaba su inocencia.

―Amor... — conteste.

―Descuida, no digas nada. Me llevo como 2 horas y media encerrado para analizar el asunto y realmente darme cuenta que soy un idiota Marcus, sé que tu no lo amas porque me amas a mí y tú no quisiste hacerlo, se sobrepasó contigo robándote ese beso y manoseándote todo cuando él sabía que tu tenías novio, tu solo te defendiste de el por qué estabas molesto que tuviera tu celular y quisiste quitárselo, entiendo que tratabas de defenderte y el té obligo a hacer algo que no querías, lo siento amor soy un idiota, un pendejo arruine la cena de reconciliación, bueno no era reconciliación porque no hemos terminado pero con la intención más pura y bondadosa haces esto sabiendo que tu no hiciste nada malo y aun así la cago.

-Jake continúa diciéndome: ― pues no dejare que ese idiota se filtre en mi vida contigo y no le daré el gusto de vernos terminados.

Se recostó sobre mi cuerpo y me abrazo con dulzura y unos cuantos besos en mi pecho y sus manos tocándome me hicieron sentir aliviado que estaba perdonado por él y que todo volvería a estar bien.

―Amor tengo hambre —contesto Jacob, sobándose el estómago y pude sentir el dolor de su pancita que crujía muy hambriento de comida.

―Oh amor te preparare algo- me levante y le ayude a él para que se pusiera de pie.

―De hecho quisiera salir a comer a fuera, no quiero estar en casa realmente y sé que dirás que no tienes dinero porque andas gastado Marcus, pero mi madre me dio otro regalo extra y me obsequio dinero, quiero gastarlo contigo, en ti más bien en una cita, salgamos a comer solo tú y yo y de esa manera te pediré perdón por el desastre que hice y el drama que ocasione.

Hice una mueca pensando ― Pues suena bien amor, pero no me gusta que gastes tu propio dinero porque es tuyo, para eso trabajo yo. Para mantenerte no crees, pero esta vez aceptare okay. Por qué tanto estrés que tengo me vendría bien salir.