- Bruno, ¿qué haces aquí? - cuestiona mi madre mirando desconcertada a la persona frente a ella.
- Vine a ver a nuestra hija. - responde. - Podemos hablar en otro momento sobre eso, lo que importa es que el tal Byron...
- ¿Qué pasa con mi hijo? - lo interrumpe James entrando a la casa.
- Cariño, él es Bruno, el papá de Madi.
Ahora que lo pienso, ¿en qué momento comenzaron a llamarse entre ellos de ese modo? Es decir, ¿cuando pasó de "mi esposo o esposa" a "el papá o la mamá de mi hija"?
Creo que no me había dado cuenta de la inmensa brecha que existe entre ambos y lo mucho que extraño que estén juntos.
Lo rara que se ve mi madre diciéndole "cariño" a James y lo tonto que se ve mi padre diciéndole "bebé" a Maurice, su esposa. Hasta ahora me doy cuenta que siento un fuego lleno de coraje atorado en mi pecho cada que los escucho diciendo esas palabras melosas, que antes se decían entre si.
- ¡Madeleine! - escucho a lo lejos la voz de James. - ¿Es cierto lo que dice tu padre?
- No. - escupo sin más.
- ¿No? - indaga mi padre. - ¿Quieres decir que fue una alucinación mía? - sonsaca mirándome a los ojos.
- Papá, déjame explicarte. - pido.
- ¿Explicar que? ¿Te está acosando? - cuestiona mi padre y James lo mira con ojos de pistola.
- No te atrevas a siquiera pensarlo. - escupe James entre dientes.
- Ya lo pensé, ¿algún problema?
La tensión entre los dos patriarcas ha crecido exponencialmente en los últimos cinco segundos. Todo se está calentando y veo como James se sube las mangas de su camisa mientras alegan.
- ¡ESTAMOS SALIENDO! - grito en medio del alegato.
Mi madre es la primera en reaccionar abriendo la boca a su máxima capacidad. Luego James se lleva las manos a la cabeza y mi padre sube corriendo las escaleras.
Todo parece pasar a cámara lenta. Voy corriendo detrás de mí padre a la vez que grito "detente" repetidamente. Mi madre y James vienen detrás de mí gritando cosas que ni siquiera entiendo.
Llegamos a la habitación y Byron nos mira confundido. Bruno, mi padre, llega directo a tomarlo del cuello de la playera para soltarle un golpe. Un golpe que se estrella directo a mi cara, ya que de un salto puse mi rostro frente al de Byron.
De repente todo es negro. Me desmayé del golpe fuerte y seco proporcionado por mi padre.
Unos minutos después comienzo a despertar y escuchar a lo lejos los alegatos de los demás en la habitación.
Un dolor punzante y casi ensordecedor me aturde por completo. Abro los ojos y veo borroso, escucho un pitido en mi oído derecho y un dolor infinito en el rostro.
- ¿Mamá? - susurro, apenas y yo pude escucharlo. - Mamá. - repito esta vez más fuerte.
- Madi, cariño. - dice mi madre mientras me sujeta en sus brazos.
- Hija... - dice mi padre acercándose a mí. - Lo siento, de verdad lo siento, no era mi intención, yo...
- Está bien, ahora solo quiero algo para el dolor, por favor. - lo interrumpo y él corre a buscar algo.
- Espera, voy yo. - le dice James y ambos salen de la habitación.
- ¿Estás bien Madi? - cuestiona Byron tomando mi mano.
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DESEO PROHIBIDO 🔞
Teen FictionMadeleine es una adolescente normal, sin nada fuera de lo común y con una vida feliz al lado de su madre. Pero no siempre puede ser así. Un cambio de vida está destinado para ella, una nueva ciudad la espera acompañada de un deseo prohibido que pon...