35- Uɴ ᴘᴇǫᴜᴇɴ̃ᴏ ᴘʀᴏʙʟᴇᴍᴀ

527 60 30
                                    

El peli-rosa miro aquello, sin duda se encontraba asombrado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El peli-rosa miro aquello, sin duda se encontraba asombrado.

Aunque especialmente se concentraba en el hecho de que él normalmente siempre se aferra al brazo del peli-morado.

Le molestaba de alguna manera que alguien más lo hiciera.

—Saiki, aquí lo tienes —. Dijo el albino llegando a su lado, dándole algunas galletas que había comprado en aquella panadería.

Pero el psíquico solo seguía mirando a esos dos muchachos.

Era claro que eso lo noto el Kimura, por lo que dirigió su vista hacia ellos.

—Ah, tal vez sean una pareja, normalmente prefieren estar a solas — Dice Jomey, agarrando al Saiki menor del brazo.

El cual solamente se aparto casi bruscamente del albino.

El Kimura lo observo asombrado y confuso a la vez por aquella acción.

No, no son pareja — Se queja el peli-rosa con el ceño fruncido y mirando al suelo.

El muchacho lo observo, aún demasiado confuso, claro que notaba que había algo que realmente le importaba al peli-rosa en esos chicos.

O tal vez en ese adolescente.

A lo que el albino suspiro pesado mientras se acercaba al contrario.

El cual estaba mirando fijamente a esos chicos otra vez.

Jomey agarro el hombro del más bajo, notando como este se alejaba en segundos.

Parecía ser que no lo quería cerca suyo.

Pero de todas maneras se quedo con él.

—Saiki, puede que ese chico te guste, pero no por eso significa que sea gay — Dice Jomey, suspirando mientras suspiraba otra vez para luego agarrar el brazo del psíquico.

Y arrastrarlo, notando como fue fácil enseguida.

El peli-rosa no pudo evitar tragar saliva mientras solo miraba al suelo con sus ojos levemente abiertos.

﹝❀⃟ ⃟⸙̒ ﹞

Esto es algo incomodo...

Piensa el peli-morado, ya que no estaba acostumbrado a que las personas se aferren de la nada a su brazo.

Solo el Saiki menor, nadie más que él.

Y eso que había aceptado la salida gracias a que le había pedido aquello en medio del pasillo, a la vista de todos.

Sabia bien que aveces era muy poco popular, y que si llegara a rechazar a la azabache esta tendría una mala reputación.

Así que acepto pero solo por aquello.

Era algo un poco difícil, teniendo en cuenta que los miraban raro.

Pero de todas maneras no le importo.

Fᴜᴄᴋɪɴɢ Iɴsᴇᴄᴜʀɪᴛɪᴇs Where stories live. Discover now