Más Allá Del Olvidó [I]

II~ Capítulo 24 - "Falsa tranquilidad - parte 1"

Les dolía ver a su amigo triste y apachurrado, les dolía ver que cada día estaba más deprimido y les dolía peor cuando recordaban que todo eso había sucedido por su culpa.
Necesitaban un plan, alguna idea que les ayudará a que Belén quiera darle una nueva oportunidad en la que su amigo pudiera probar que en verdad se había enamorado de ella. Pero eso era cosa para otro día, ahora debían ir a comprobar si todo lo que Javier les dió podría servir de algo.

En un papel había anotado una dirección en la que ellos debían ir para encontrar todas esas pruebas que Javier prometió aún sin saber qué era lo que realmente se encontraba escondido en su lugar seguro de hermanos.
Ana, Ángel y Erick se habían armado de valor y fueron a la búsqueda junto a un manojo de nervios y miedo que era difícil dejar en casa.
El estómago de Ana se revolvía, la boca de Ángel tenía un sabor amargo, el pecho de Erick tenia una extraña pesadez que le impedía respirar con normalidad, la cabeza de Ana no estaba tranquila, menos la de Ángel, mientras que la de Erick imaginaba un sin fin de cosas que podrían ocurrir. Cada uno tenía un presentimiento, cada uno sabía que algo podría salir mal pero aún así fueron al encuentro de un destino incierto.

-¿Por qué no solo te mudas a México junto a Astrid? -preguntó Erick cuando todos se detuvieron frente al edificio que comenzaba a caerse. Un edificio que se había quedado a medio construir y que por lo mismo su estructura era más inestable.

-Arturo la amenazó, le envío a Carlos el aviso de que se iban a arrepentir por haberlo denunciado -respondió Ángel deteniéndose detrás de Erick.

-es muy probable de que nos estén vigilando -los tres miraron a todos lados sintiendo como alguien los seguía. Se estaban poniendo paranoicos -. Si alguno de nosotros llega a ir junto a ella quizá Arturo descubra su paradero y eso no es nada bueno -Dijo Ana tomando el valor de dar el primer paso adelante para entrar con cuidado al final de su camino.

-Ya veo, ¿por eso tú tampoco vas con ella? -Erick pregunto a su amigo cuando él la siguió.

-Es algo complicado; estoy aquí porque quiero y por obligación -respondio Angel ya perdiéndose adentro dejando solo a su amigo.
Erick dio un último suspiro como si supiera que aquella lenta respiración fuera la última tranquila apartir de áhora.

Buscaron por cada rincón visible, buscaron debajo de las escaleras y enzima de ellas. Era un lugar descascarado y debían tener cuidado de donde pisaban, por donde caminaban y en qué lugar podían quedarse quietos.
Ana se movía con rapidez, Erick sostenía el brazo de Ángel con fuerza para sentirse seguro a algo pero su amigo no estaba del todo confiado, sus piernas temblaban e iba lento en esa viga de madera que conectaba con el tercer piso. Ana había notado que su amigo Erick necesitaba un poco de tiempo para relajarse por lo que le pidió que mejor bajará de nuevo al primer piso y que desde allí vigilará que nadie llegará. Erick no lo pensó mucho, se soltó de su amigo y volvió por donde había llegado.

-ya buscamos por todos lados y no hay nada -dijo Ana cansada, arrojando una piedra desde el barandal inestable que estaba en el cuarto piso.

-¿Cómo llegaste hasta allá? -grito Ángel un piso abajo viendo a la piedra caer al piso donde Erick debía estar más tranquilo.

-llamaré a Javier, tal vez el tenga una nueva idea -Ana ignoró la pregunta de Ángel.
Él investigó por su cuenta el camino, descubrió un castillo algo estable con unas cuantas grietas por las qué tal vez Ana había subido.

°°°

Su respiración aún continuaba agitada. Le tenía miedo a las alturas y era aún peor cuando el suelo en donde estaba sujetó no era del todo estable y corría el riesgo de caer jalando su cuerpo junto a él.
Se sentó afuera del edificio. Pensó en todo lo que estaba haciendo por su mejor amiga qué tal vez aún ni siquiera podría recordarlo, se preguntaba si valdría la pena todo este sacrificio o si había arruinado lo mejor que tuvo en toda su vida por un bien ajeno. ¿Cómo podría recuperar a Belén? ¿Que podría hacer para que le perdonará?. Por segunda vez en esa hora, se insulto a sí mismo por haber sido un estúpido y hacerle caso a sus amigos.