ángel ━━━ kamado tanjiro

𝟢𝟩. .⃗ ༉‧ veneno !

 

         𝑨́𝑵𝑮𝑬𝑳 ૪'ރ፧ ࿐

↳ ׂׂૢ༘ ۵'⌧.♯݊ ✩ 𝙲𝙷𝙰𝙿𝚃𝙴𝚁 𝚂𝙴𝚅𝙴𝙽
━━━ veneno ━━━

LA LUNA BRILLANA CON INTENSIDAD AQUELLA NOCHE, la media demonio sintió un escalofrío en cuanto un viento frió paso por su nuca. Pero aquella sensación desapareció en cuanto vio que su compañero de cabellos rojos volvía sano y salvo.

──¿Acabaste con ese monstruo? —preguntó Inosuke con su tono de voz habitual, ignorando el hecho que estaba considerablemente herido.—

──Oye, ¿estás bien? estás sangrando. —ignoró la pregunta el Kamado preocupándose por su aspecto.—

Tanjiro apartó la mirada de Inosuke para centrarse en Yuna, la escaneo de arriba a abajo, sintió alivio al ver que se encontraba con ni una sola herida.

──¡Te pregunté si ya derrotaste a esa cosa!

──Dios, cerdo, eso es lo de menos, lo importante es tu estado. —regaño la Hoshikami después de que el de la cicatriz confirmara la muerte del demonio.—

──¡No me vengan con su sensibilidad y amabilidad! ¡no la necesito! ¿entienden? al final, todo lo que hagan yo también lo puedo hacer. Dentro de poco, mi cabeza será más dura que la tuya, y seré mucho mas ágil que Nuna. Y no me hagas de hablar de .... de ....

──Cállate, no estás bien. —lo interrumpió la fémina para después sacar un par de vendas que guardaba en su capa.— Tanjiro, venda a este estúpido.

Tanjiro obedeció la orden de la azabache casi de inmediato, comenzando a vendar al de la máscara, que no paraba de quejarse hasta que la Hoshikami golpeó su nuca con fuerza, atontándolo.

Una vez con Hashibira vendado, comenzaron a caminar, pero los detuvo el sonido de un rayo.

──¿Y ese sonido? ¿cayó un rayo? —pregunto Kamado.—

Yuna se limitó a alzar los hombros, mientras que Inosuke respondía de mala manera y Tanjiro le daba vueltas al asunto, hasta que Inosuke intentaba tomar otro camino siendo detenido por sus compañeros. La pequeña "discusión" terminó en cuanto vieron a dos demonios, que eran casi iguales.

──¡Oigan, demonios de mierda! ¡los voy a hacer pedazos! —gritó el de la máscara.

Las dos demonios comenzaron a correr, siendo perseguidas por Hashibira.

──¡Ahora, padre! —gritaron ambas a la vez.—

──¿A quien le dices "padre"?

La pregunta de Inosuke fue contestada en cuanto otro demonio, grande y musculoso, caía casi encima de él, tirándolo a los pies de sus compañeros. Tanjiro e Inosuke temblaron un poco al ver la apariencia del demonio, mientras Yuna fruncía el ceño por el desagrado.

──¡No se acerquen a mi familia! ¡aléjense de ellos! —les grito, golpeando el suelo y creando un pequeño cráter.

La situación le traía algunos recuerdos a Yuna, pero solo que era a la inversa, ella protegiendo a Muzan de cualquiera que intentara hacerle algo con solo una orden. Como la mejor guerrera que tenía, porque así era, a los ojos del rey de los demonios, Yuna era el demonio más bello y fuerte que tenía a su disposición.

La rabia se apoderó del cuerpo de la Hoshikami al ver como una de las demonios miraba con una sonrisa de superioridad la situación, así que aprovechando que Tanjiro intentó cortarle el brazo al demonio e Inosuke estaba en un pequeño trance, tomó impulso saltando arriba del demonio y corriendo hacia aquella criatura que causó la ira dentro de ella.

──Sobrevivan de alguna forma. —fue lo que pudo escuchar Tanjiro antes de perder a la media demonio de vista y gritar su nombre en un fallido intento para que volviera.—

Odiaba admitirlo, pero en su interior crecía un pequeño cariño hacia el grupo con el que estaba. Odiaba que eso estuviera pasando, si su padre se llegaba a enterar que se estaba distrayendo de su misión, los mataría sin dudarlo de las formas más crueles frente a sus ojos, Yuna no quería que eso pasara, no otra vez.

La persecución seguía, la demonio se separó de su hermana y de vez en cuando tiraba pequeños hilos de araña de sus manos, que la de ojos escarlata esquivaba con facilidad.

──Maldita hija de... ──maldijo la de la capa cuando aquel ser activo lo que parecía ser una trampa, haciendo que un tronco bastante grande cayera hacia donde se encontraba Yuna.— Ahora si que la mato.

Hoshikami aumentó su velocidad de manera descomunal, llegando hacia donde estaba la demonio, tomándola del cabello y causando que se arrodillara.

──La ultima persona a la que perseguí, la encontraron en un basurero sin las extremidades, ¿prefieres que te haga lo mismo o sea más suave?

Aquella demonio tembló en cuanto miro los ojos de la mujer frente a ella, sus ojos brillaban de un escarlata claro, y su pupila había pasado de ser redonda a ser afilada. Hoshikami Yuna en ese momento era una copia exacta de Kibutsuji Muzan.

──Mientras te perseguía pude darme cuenta de los muchos cadaveres qué hay por aquí, la gran mayoría tenían las extremidades vueltas en araña y lo que parecía ser un hilo de araña incrustado en el cuello. Si mis deducciones no fallan, trabajas con veneno, ¿o me equivoco?

──S-si, lo hago —contestó en voz baja la demonio, aterrada ante la imponente presencia ajena.—

──Quiero que me inyectes veneno, pero la cantidad suficiente como para matar a un demonio de alto poder. —ordenó.—

──¿Q-que?

Podía parecer una orden estúpida, pero no lo era. En todas las misiones siempre salía intacta, estaba segura que esta vez sus compañeros saldrían gravemente heridos e incluso tal vez muertos, era casi imposible que alguien de su rango saliera de una misión así ilesa. Así que no había otra forma, o seguramente comenzarían a sospechar.

──¿Eres sorda o que? no te lo volveré a repetir, si no lo haces, te cortaré en pedazos, menos tu cabeza. —amenazo haciendo más fuerte el agarre al cabello de su enemiga, haciendo que esta soltara un chillido.—

──¡E-esta bien! —Asintió, para después levantar su dedo y que de este saliera una telaraña que se incrustó al cuello de la Hoshikami, que soltó un quejido.—

──Buena chica. —dijo mirándola directo a los ojos.— Por ser obediente tendrás una muerte rápida.

Dicho y echo, antes de que la demonio pudiera reaccionar, su cabeza estaba rodando en el piso y desintegrándose. Yuna guardó su katana, e hizo que sus ojos volvieran a la normalidad. Pero antes de poder caminar o hacer otra acción, su cuerpo comenzó a doler a sobre manera, haciendo que cayera al suelo.

──El cielo, está muy bonito hoy como para morir observándolo. —susurro a la nada.—

Con las pocas fuerzas que le quedaban se concentraba en que su cuerpo no luchara contra el veneno. Tal vez el veneno solo había sido una excusa para por fin morir y ser libre. A los ojos de Yuna, era justo que muriera sufriendo, lo merecía por haber asesinado a tanta gente y por servirle a Muzan.

──Kiyomi, si es que muero, ¿podré ir al mismo lugar en donde estás tú? —murmuró antes de ver todo negro.—