Parte sin título 4

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Madre

Hemos llegado al puerto hace unos días, todo está bien. Aunque unas noches atrás, todavía en altamar, el primer oficial me contó una historia, era sobre una doncella, hija de un capitán de guerra, y de su furtivo enamorado, capitán de guerra enemigo. Ella miraba todas las noches el cielo y su enamorado también, parece que sólo así se podían aproximar, pero de pronto un día ella decide rogar a su feroz padre la piedad por su enemigo; la querida y dulce hija le cuenta, alucinada, su amor y sus planes a futuro de casarse con aquél. Y si un día dejase de quererme, marcharé al puente viejo, más para tirarme al Arno, suspiró casi envuelta en sentimiento.

No sé por qué pero casi pude entenderla, pude ver su necesidad de amor, la fuerza de su vivo corazón y hasta su preocupación por la fugacidad de su felicidad envuelta en su historia de amor. Ojalá todos pudiéramos amar así, sobre todo cuando somos jóvenes y atizar con el mismo carbón y la misma intensidad el trabajo diario, la defensa de la familia y nuestro incierto porvenir.

Te mando un abrazo y todo mi amor.

Libro del naveganteWhere stories live. Discover now