Madre
He estado ausente mucho tiempo, ahora soy un hombre del mar de tiempo completo; es la temporada alta de la caza del camarón y de la langosta. Puedo ahora distinguir sin problemas un cardo común de una trucha de río.
Madre, me siento un hombre afortunado porque he salido y estoy encontrando mi camino, y aunque son tiempos difíciles no puedo dejar de pensar que era mejor ahora que nunca. Nada duele más que la distancia, pero la nostalgia es una trampa. Me he vuelto a acercar a mis libros preferidos, descubro bajo una nueva luz a Quirino que alumbra mis noches en medio de la soledad del mar. Hace unas semanas estuve en un huerto, era un amplio espacio frutal; las colinas llenas del verde limón y las llanuras de la manzana roja, la planicie toda de la zarza y la uva, corté algunas y regresé a mi lugar común en el barco, así es mi vida ahora.
Te envío un abrazo y todo mi amor. Guarda estas cartas porque serán algún día para consuelo.
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Libro del navegante
RastgeleEs más bien un ejercicio de creación literaria, una escritura sin tanto pensarla, una historia construida en el momento a momento. La narración de una vida profundamente deseada pero que no pudo ser.