Alma Gemela |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔

07

—Yoonhee, ¿me estás escuchando? —la voz de Youngjae a través de la línea me hizo salir de mis pensamientos.

—¿Que?. Si. Claro que te estoy escuchando —repetí.

—¿Te encuentras bien? —pregunta mi esposo preocupado—. Es la segunda vez que te quedas muda durante la llamada.

—Si si. Me encuentro bien —asiento repetidas veces aunque el no me pudiese ver—. Es solo que hoy estoy media entretenida.

—¿Se puede saber por qué? —pregunta entonces.

—Nada importante —contesté—. No te preocupes. Sigamos hablando. Prometo que no volvere a desconcentrarme.

—No quiero preocuparme y acabar yendo a Busan para verte y estar seguro de ello —dice y sé que seria capaz.

—No es necesario cariño. Todo está bien —le aseguré—. Entonces, ¿que me decías?.

Luego de la conversación con Youngjae y de repetirle una y otra vez que todo estaba bien, bajé para ayudar a la abuela con la cena ya que habíamos empezado pero debido a la llamada me había ido hacia el cuarto.

—Siento si tardé —digo cogiendo el delantal desde el clavo donde colgaba con dos delantales más.

—No te preocupes nena —me sonríe la abuela—. ¿Todo bien con Youngjae?.

Me pongo a su lado para continuar en lo que hacía que se trataba de preparar el caldo.
—Sí. Lo que pasa es que quedamos de llamarnos todos los días. O enviarnos mensajes —le sonreí mientras cogía una cucharada de sal y le hechaba al caldo para luego revolver—. Nunca nos habiamos alejado y lo extraño.

—Me imagino —me sonrió comprensiva.

La preparación de la cena transcurrió armoniosa y entre risas y anécdotas por la abuela.
Mamá regresaba al dia siguiente ya que estaba de guardia por lo tanto mi abuela y yo tuvimos una cena tranquila mientras platicábamos.

Al terminar ella fue a ver la televisión mientras yo me encargaba de darle la comida a Yangyang y fregaba después.

—El tiempo pasa tan rápido aquí en el pueblo —suelto una risita sentandome al lado de ella al terminar.

—¿Si eh?. Ni siquiera te das cuentas —concordó.

—Mhm —asentí—. Abuela...¿puedo hacerte una pregunta?.

—Claro preciosa —se incorporó para verme—. ¿Que ocurre?.

—¿Crees en las almas gemelas y esas cosas? —le pregunto curiosa.

Ella me mira por unos segundos.
—¿Por qué quieres saber eso? —añade una sonrisa al final.

Me encojo de hombros despreocupada.

—Solo...curiosidad —contesto.

—Mhm ya veo —asiente despacio y yo la miro entre curiosa y expectante—. Si creo que existen.

—¿Ah si? —no pude evitar sorprenderme—. ¿Piensas que eso existe realmente?.

—Clarooo —asintió y sonrió—. ¿Tu no crees que hay personas que estan destinadas a estar juntos?. Encontrarse, amarse.

—No lo sé. Puede que sí. Puede que no —digo casi para mi misma—. ¿Podría yo asegurar que Youngjae es mi alma gemela?. Yo lo amo. Y también nuestra relación se basa en muchísimas cosas buenas. Confianza, sinceridad, respeto. Somos amigos. ¿Debería decir que el es mi alma gemela?.

Mi abuela sonrió y puso su mano sobre la mía dandole un pequeño y suave apretón.

—Eso debes descubrirlo tú —me miró—. Tomaré una cucharada del jarabe que compraste y me voy a la cama. ¿Tu irás a dormir ya? –se levanta del sofá mientras me mira y espera respuesta.