Capítulo 39

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- Es que... bueno... es vergonzoso de decir - Me rasqué el cuello mientras apartaba la mirada, su mano se posa en mi cadera y yo suspiré - Me molesta que hayas estado con ella... de esa forma... ya sabes... - Me sonrojé - Pero supongo que si fingía ser tu Mate no se podía evitar... -

- ¿Era eso? -

Me cubrí con la manta hasta la cabeza.

- Te dije que era vergonzoso... -

Escuché su risa entre dientes pero luego se mete bajo la manta y me mira.

- Para mi es normal que pienses eso, a mi no me gustó que estuvieras a punto de meterte con aquel otro en el yate, y yo seguía creyendo que tenía otra Mate -

- Ni me recuerdes eso... - Me cubrí el rostro con ambas manos - Gracias por evitarlo y... lamento molestarme contigo por hacerlo... -

Aparta mis manos con delicadeza y me sonríe; Diosa... amo aquella sonrisa.

- No te preocupes más por eso, ya es pasado - Me abraza y yo sonreí mientras me sentía mejor y más cómoda y cálida.

- Ahora que lo recuerdo... - Me separé muy poco solo para ver su rostro - Saltaste al agua por mi... -

- Sí, y estaba aterrado... dudé en hacerlo pero estaba más aterrado de perderte, así que... me alegra haber saltado -

Me sonrojé y volví a esconder mi rostro en su pecho, él comenzó a acariciar mi cabello y yo su brazo frente a mi que se posaba en mi cintura, pasaba mis uñas levemente pero luego comenzaba a sentir mis párpados pesados y con ganas de dormir.

- Descansa, princesa... -

***

***

Narra Matías

- ¿Planeas quedarte por aquí? - Pregunté mientras ambos veíamos el atardecer desde una roca cerca de la playa, el agua que golpeaba esta llegaba a cubrir mis pies y la aleta de su cola de sirena.

- Bueno... traicioné a mi clan al ayudarlos a ustedes, si regreso ahora... no me irá nada bien... - Baja la mirada y suspira, claramente estaba triste y eso no me agradaba.

- Lamento que estés pasando por todo esto... -

- No es tu culpa, yo decidí ayudar a tus amigos -

- Pero fue la que creía mi amiga quien te metió en esto... -

- Sigue sin ser tu culpa, pero... ¿Sabes una cosa? Creo que... alejarme de mi clan será lo mejor... tenían tantas reglas que me sentía agobiada allí, hacían cosas que yo no creía correcto... - Voltea a verme y sonríe - Te conocí a ti por llevarles la contraria... y me agrada -

Me sorprendí, sonrojé y caí de la roca en un segundo, al salir a la superficie Nerea estaba riendo a carcajadas y eso me dejó realmente hipnotizado, su risa... su voz, toda ella era hermosa...

- ¿Quieres ver algo? - Me hace reaccionar y luego de parpadear un par de veces asentí, ella se mete al agua y me mira sonriendo antes de agarrar mis manos y hundirnos lentamente.

Tomé cuanto aire me fuera posible y ella, sin soltar mi mano comienza a nadar y llevarme a su lado. Nos alejamos de la costa y nos adentramos más profundo en el agua, nunca había nadado tan lejos pero no sentía ningún peligro o miedo; porque estaba con ella.

Ella se detiene y mira al frente, yo la miré mientras me acomodaba a su lado y luego mirar lo que ella sorprendiéndome bastante pero sonriendo por lo realmente bello que se veía aquí, habían peces de todo tipo, otros animales y plantas.

Vi entonces como ella se adelantaba y se acercaba a los peces, los cuales se acercaron a ella y nadaron a su alrededor, ella se mueve con ellos siguiéndola y sonríe ampliamente. Sin darme cuenta ya me había quedado atontado por ella, la veía y sonreía como idiota, pero no me molestaba.

Me mira y me extiende la mano, yo fui hacia ella como perro obedeciendo a su dueña y realmente no le veía lo malo, si era Nerea entonces no me importaba que así fuera.

Aunque... yo no era como ella así que no me había dado cuenta cuando ya me estaba comenzando a faltar el aire.

- ¿Matías... ? - Ella me agarra de los hombros mientras yo comenzaba a verla de forma borrosa pero sonreí.

Es hermosa...

- ¡Es verdad! - Dice sobresaltada y entonces me agarra la mano y me arrastra hasta la superficie y me luego a la costa.

Quedé acostado sobre la arena, adormilado, ella se coloca junto a mi pero me mira preocupada.

- Lo siento, olvidé que necesitabas aire ¿Estás bien? ¿No vas a morir? ¿Llamo a alguien? Dime algo, Mat... - Ella se detiene cuando yo apoyé mi mano en su mejilla.

- Simplemente hermosa... -

Sus mejillas se tiñeron de rojo rápidamente y ella se sorprendió bastante, pero no dice nada, solo suspira.

- Me asustaste... -

- Lo siento - Ella niega y apoya su mano sobre la mía en su mejilla y sonríe.

- Menos mal estás bien... -

SIEMPRE JUNTOSWhere stories live. Discover now