SIEMPRE JUNTOS

Capítulo 11

- ¡Llegamos! - Matías e Iván salen corriendo de la camioneta y se acercan al mar junto a los demás compañeros.

- Bien - Jane y yo sonreímos y fuimos a dejar nuestras cosas y quitarnos la ropa para quedar en nuestros bañadores.

Aunque escuchamos unos silbidos, al mirar supimos que fueron los mellizos, pero otros chicos también nos veían.

- Amo la playa - Matías e Iván chocan palmas.

- Oigan, una es mi hermana - Adrián hunde sus cabezas bajo el agua y ellos agitan los brazos queriendo que los saque.

Jane y yo reímos por aquello pero yo miré a un lado viendo a Oliver aún cerca de la camioneta, me acerqué a él.

- Eh, no pareces un cachorro, más bien un gatito - Dije haciendo que me fulminara.

- Sabes que no me gusta meterme al mar - Se queja.

- Lo sé... pero no necesitas ir a lo profundo, Oliver tu no le temes al agua, le temes a lo que puede haber debajo, pero créeme... en la orilla estás bien -

Gruñe un poco y bufa mientras aparta la mirada pero suspira y asiente; sonreí, agarré su mano y lo estiré para que viniera conmigo hacia donde dejamos las cosas, Jane ya fue junto a los demás.

- Aunque, podemos quedarnos aquí si quieres - Mencioné.

- No quiero arruinarte tu día de playa, mejor ve con los demás -

- No pienso dejarte solo aquí, así que o tú vienes conmigo o yo me quedo contigo ¿Qué prefieres? - Resopla.

- Está bien, vamos... - Dice no tan seguro.

Asentí, entonces él se quita la camisa llamando la atención de todas las chicas y yo no era la excepción, pero me obligué a reaccionar y disimular para irnos hacia el agua.

- Vamos... estarás bien - Le dije cuando se quedó cerca del agua pero sin entrar, le tendí la mano.

- Hm... no lo sé... - Duda y yo me acerqué.

- ¡No puede ser! - Miramos atrás viendo a los chicos sorprendidos mirándonos.

- ¡¿Tienes miedo del agua?! Eso no me lo esperaba - Dice Iván.

Vi el rostro avergonzado de Oliver, se llevó la mano tras la cabeza y se estiró un poco el cabello, yo apoyé mi mano en su hombro pero volteé con una mirada asesina hacia Iván quien se escondió atrás de Matías, quien se escondió tras Adrián, quien se escondio tras Jane.

- ¿Qué les pasa a ustedes? - Dice Jane.

- Cuando se trata de defender a Oliver ella se vuelve irreconocible - Dice Matías.

- Me duele, pero es su favorito - Iván dramatiza con gestos.

- Ni siquiera a mi, que soy su hermano, me defiende pero a él más -

Me crucé de brazos y los miré fulminante y sonrojada a la vez, ellos se escondieron debajo del agua pero resoplé y volví a mirar a Oliver.

- No les hagas caso, pequeño gatito - Gruñe un poco y yo reí - Ven -

Le tendí ambas manos de nuevo pero él se me queda viendo; finalmente suspira hondo para calmarse y agarra mis manos, yo sonreí y entré al agua sin dejar de mirarlo hasta que estuvimos con el agua hasta nuestro pecho, bueno, yo hasta mi cuello.

- ¿Ves? No pasa nada, y mira, sumérgete - Me metí bajo el agua, él se quedó unos segundos pero luego igual se sumergió y me miró.

Sonreí y volteé hacia un lado viendo a los peces y las plantas coloridas de allí, miré a Oliver quien se quedó mirando pero agarré su mano y nadé un poco para seguir, lo veía constantemente y él sujetaba con fuerza mi mano.

Me sentía orgullosa de que podía hacer esto, de que se animara a adentrarse, la primera y última vez casi se ahoga porque una mantarraya se le apareció de golpe y se asustó, era un niño, se traumó más cuando descubrió que las mantarrayas pueden matar con su cola ya nunca más quiso saber del mar.

Pero ahora... porfin puede disfrutar de esto.

Vimos algunos corales, varias especies de peces y algunas otras criaturas como cangrejos y demás. Salimos a la superficie tomando una gran bocanada de aire y suspirando.

- ¿Sabes? Papá me dijo una vez que se encontró con una sirena que lo quiso llevar al fondo del mar - Conté.

- ¿Ah? ¿Y cómo se salvó? -

- Apareció mamá y la degolló, claro que papá tampoco se salvó... lo castigó con la ley del hielo por un mes por dejarse engañar - Reí y Oliver igual.

- A veces tu mamá da un poco de miedo -

- Ah, lo sé... me tocó verla enojada - Me dio un escalofríos al recordarla pero suspiré - ¿Cómo te sientes? -

- Como si algo fuera a agarrar mi pierna en cualquier momento -

- Podemos volver ya, hiciste mucho -

Asiente y ambos regresamos a la costa pero entonces yo me detuve un poco mientras Oliver se alejaba, miré hacia atrás pero vi movimiento en el agua, me pareció ver una cola de pez. ¿Será una de ellas... ? No lo creo, ya estaría cantando para atraer a alguno de los chicos.

Pero... ¿Y si sí era... ? ¿Qué hacía aquí tan cerca... ?

- ¿Qué sucede? - Miré a Oliver.

- Ah nada, pensé en ir más a fondo, para probar hasta donde puedo llegar - Fui hacia él.

- ¿Y si aparecía un tiburón o algo? -

- No te preocupes, no fui - Reí y salí del agua.

¿Debería decirle... ? No quiero asustarlo más, si se entera que vi una probable sirena ya no querrá volver a tocar el agua, y no sé si en realidad era una.

Creo que mejor me lo guardaré.