A-Yuan, ¿Me recuerdas?

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A-Yuan no despertó hasta el día siguiente, cosa que lo avergonzó aún más que recordar todas las cosas que se había atrevido a hacer el día anterior. Así que cuando su padre entró al cuarto con las bandejas de comida fue rápido en levantarse de la enorme cama, dando una reverencia de disculpas con si rostro de un muy divertido tono rosado.
— Me siento avergonzado de mi comportamiento el día de ayer, espero no haber causado muchos problemas.

— No fue problema. Traje el desayuno.

La reverencia del menor se extendio un poco más, más que por la etiqueta, fue por la sorpresa de no verse afectado por las cosas que hizo ayer.

Cuando recrobo la postura, fue a donde regularmente comían, se sento adecuadamente y agradeció por los alimentos. Debido a que no se hablaba en las comidas, el menor se dio un tiempo para meditar lo que sucedió.

Después de ser cargado por su padre, no recordaba mucho más, sintió que fue dejado en una muy cómoda cama y fue arropado, si es que no se lo había imaginado. Mientras pensaba, observo su propia cama, dandose cuenta que estaba perfectamente hecha, cuando giro su vista a la cama de su padre, vio ambos lados de la cama desechos. Se atragantó un poco con su comida al darse cuenta que había dormido con su padre.

Wangji miro a su hijo en silencio, siguió siguió mirada y sus orejas se colorearon de rosado cuando se dio cuenta.

Una vez terminaron la comida, Wangji le acercó un pequeño cuenco con medicamento al menor, carraspeando muy poco su garganta.

— Ayer el medico dijo que tenias poca fiebre, debes tomar esto.

Wangji le tenía un terror a la fiebre. Lo había visto con Wei Ying, y lo había visto con A-Yuan. En ambos casos, casi pierde a ambos. Si A-Yuan vuelve a enfermar de lo mismo, estaría haciendo mal su trabajo.

— Revise tus trabajos, siguen siendo muy buenos, aun tienes pequeños errores.

— Lo lamento, mejorare al siguiente trabajo.

— Toma tu tiempo, siguen siendo buenos.

A-Yuan no estaba acostumbrado a recibir tantos halagos, así que su rostro volvió a colorerse de rosado, cosa que le gustó mucho a Wangji.

Definitivamente tenía que darle más halagos a su hijo.
Mientras Wangji recogía los platos, ambos volvieron a quedarse en silencio. El corazón de Wangji se apachurro poquito, pues aunque quería hablar más con él menor, no sabia que palabras decir.

— Han Guan Jun.

A Wangji no le gustaba ser llamado así.

— ¿Mhm?

A-Yuan jugo poquito con sus dedos, nervioso mientras sentía la juguetona brisa entre sus pies.

— Cuando tocas Inquiry y te comunicas con los espíritus, ¿es posible que ellos te sigan?

Eso confundió al mayor.
— Mhm, si el espíritu tiene algo por lo que quedarse, se queda, usualmente no necesitas tocar Inquiry para que se muestren.

— Entonces, ¿como sabemos si ya estaban aquí, o si llegaron con la canción?

Wangji volvio a sentarse. Algo especial de A-Yuan, era la forma muy parecida en la que podía actuar a Wei Ying en ciertas ocasiones. Justo ahora, tenía esa ligera mueca que el ojigris hacía cada vez que tenía algo en mente.

— Señales. Siempre hay.

— ¿Siempre son las mismas?

— Mhm, depende del espíritu, y la conexión con quien se manifiesta.
— Si se manifiesta, ¿es solo porque hay una conexión?