Capítulo 30. Monstruos

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Aurora:

Corrí, corrí lo más rápido posible, ni siquiera entendía como es que estaba viva después de una herida así, corrí como si mi vida dependiera de ello pero en este caso no era la mía, sino la de las personas más importantes en esta misma.

Después de levantarme con la respiración increíblemente acelerada me di cuenta de que aun tenía un corte en la garganta pero no entendía por qué, ni siquiera Bonnie o Matt. No tarde mucho en descifrar una respuesta; Kai Parker y yo estábamos vinculados, todo lo que le pasara a él me pasaba a mí, nuestras vidas estaban atadas desde que lo mandaron a la banca mágica y a mí a dormir.

Tenía ganas de ser un vampiro para llegar tan rápido como fuera posible al lugar de la boda que Bonnie y Matt me proporcionaron, pero tan solo era una tonta bruja que tenía miedo de enfrentar al ''amor de su vida'' y a su ''familia''.

Finalmente llegue a la escena y efectivamente, habría deseado no tener que pasar por todo esto y ser una simple humana con una simple vida, pero no, soy Aurora Blake y más tarde sabría que este era el menor de mis problemas.

Caminé entre los escombros que había, no estaban Jo, Alaric, ni nadie de las personas que conocí aquí, solo el aquelarre, los cuales estaban muriendo.

Y la vi, vi a mi hermana Hazel tirada en el suelo quejándose.

- Haz - me acerque a ella - Haz mírame- tome su cabeza entre mis manos.

- ¿Aurora? - me miro con miedo - perdóname-

- No hables - estaba sintiendo el miedo que tenía - Estarás bien -

- Perdóname por la manera en que te traté la última vez, no debí hacerlo - se disculpaba - eres mi hermana y jamás tuve que decirte eso - me trato de sonreír.

- Eres mi hermana Hazel, siempre lo serás - pase mi mano sobre su mejilla - te quiero - comencé a usar mi habilidad para que dejara de sentir dolor.

- Yo también te quiero - comenzó a cerrar los ojos - Cuídala mucho por favor- lo último lo susurro.

- ¿Como dices? - ¿cuidar a quién? no entendía.

- Cuídala a ella y a las gemelas - sus ojos pronto se cerraron.

- Hazel, Hazel no me dejes - comencé a llorar - Por favor hermana, no me dejes - lo último lo decía entre lágrimas.

Hazel se habia ido.

Me levante del suelo mientras dejaba su cuerpo suavemente recostado, me limpie las lágrimas con mi suéter y me quede parada tratando de entender lo último que me dijo. Estaba a punto de salir cuando visualice a mi padre en el suelo. Decidí acercarme a él.

- ¿Estas contenta? - pregunto al verme - te deshiciste del aquelarre como siempre quisiste -

- Venia a despedirme de ti y a hacer tus últimos momentos más amenos - suspire - pero creo que en el fondo te mereces terminar de esta manera -

- Eres un monstruo, igual que esa abominación que nos hizo esto -

- Quiza los monstruos son tu y Joshua, ustedes nos hicieron ser esto. Jamás me creíste cuando te dije que yo jamás lo ayude y sé que no me creerás nunca - me acerque a el - me alegra no ser tu hija, al menos yo no moriré - comente con odio.

- El vendrá por ti - comenzó a toser.

No quise escucharlo más y me empecé a alejar de él, pero me interrumpió.

- Farisha no me puedes dejar aquí - grito - soy tu padre, jamás serás nada sin mi -

- Vete al infierno - grite realmente enojada, tanto que no tuve el control de mi magia y provoque que pedazos de cristal se enterraran dentro de su pecho.

Para cuando reaccione ya era tarde, lo habia matado.

- Hola, ¿alguien está vivo? - era la voz de Kai - Quien esté vivo alce la mano, quiero sangre -

Antes de acercarme a él escuche a Bonnie entrar ¿qué hacia aquí? ¿acaso quería morir? Pero cuando escuché que hablaban de Elena Gilbert no pude no entrometerme.

- ¿Qué demonios hiciste Kai? - le pregunte con enojo y preocupación.

- Hice lo que tenía que hacer - me miro con seriedad - Vamos Ro, tu más que yo odiaba a este aquelarre, ¿no querías sacarlos de tu vida? pues ya está - trono los dedos.

- Pero no de esta manera - me miro de arriba a abajo.

- Veo que también te divertiste - sonrió macabramente - ¿papa Blake está muerto? -

- Fue un accidente - conteste sin mirarlo, mi ropa estaba llena de su sangre.

- Si claro, pero lo que más me alegra fue que mi teoría funcionara- se acercó a mi - como tú no eras hija de Alonso, no moriste-

- Me desmaye por tu culpa idiota - lo empuje y me miro mal - tu vida y la mía estaban conectadas y cuando te suicidaste me mataste simultáneamente, aun no entiendo cómo es posible que este aquí -

- Te quiero Rory, eres la única persona que aprecio en este mundo y por eso te pido que te vayas - lo mire triste - te prometí irnos de aquí pero no soy digno de ti.

- Ya me has roto el corazón Kai - lo miré - me rompiste el espíritu hace 20 años y ahora ¿quieres romper mi alma? - me contuve las lágrimas.

- He hecho cosas que no me enorgullecen pero solo puedo decirte que eres lo mejor que me ha pasado - me abrazo - tu eres la única que puede solucionarlo, tú eres la llave - fije mi mirada hacia el pero mis ojos se cerraron.

Y supongo que me dejo en un hechizo para dormir porque no recordé ni senti nada. Para cuando desperté vi a Bonnie Bennet en el piso, parecía estar sufriendo o quizá muriendo, mi primer instinto fue acercarme a ella pero llego Damon.

- Que tonto eres - exclamo Kai, recordándome que aun seguía aquí - te entrego a Bonnie Bennet moribunda en bandeja de plata y la dejas pasar -

- Tranquila - susurro Damon.

- Traducción ella morirá - hablo Kai.

- Yo puedo ayudarla - exclame llamando la atención de ambos - yo la ayudare Damon, solo déjanos ir, - no era tonta sabía que me podría matar a mi o a Kai.

- Tu no te metas Rory - me dio una mala mirada - Claro que no tienes que ayudarla, podrías irte, muere por colapso pulmonar sin sangre en tus manos y tú y Elena tendrán la vida que siempre soñaron - Damon pareció pensarlo - Como sea tienes que decidir -

- Lo lamento Bonnie - se despidió de Bonnie, ¿la dejaría morir? y se fue.

- Kai por favor vámonos – suspire – no tienes que hacer esto – me miro con duda.

- Aun no Rory, recuérdalo tu eres la llave maestra – pronto recordó lo que estaba pasando - ¿Es todo? ¿te dejo? - Bonnie tosía y me arrastre a ella - Esperaba que esto lo torturara por un tiempo. Digo hubiera lanzado una moneda, cara te salva, cruz salvaría a - no pudo terminar de hablar porque Damon lo mato.

- Fue cara – hablo Damon.

- ¡Noooo! - fue lo único que pude gritar.

Senti mi alma romperse Damon acababa de matar a Kai, mi Kai Parker. Solo me levante como pude pero no podía ni acercarme a su cuerpo, no estando de esa manera.

Senti un gran vacío, quizá por la conexión que teníamos. Caí al suelo de rodillas y grite fuertemente, mi garganta se desgarro por el dolor que sentía.

Llore y grite hasta que mi cuerpo no pudo más y me desmaye.

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¡Chan! ¡Chan! ¡Chan! ¿Ahora que pasará?
¡Dios escribí esto hace un tiempo y me hizo recordar que este capítulo es de mis favs.

Gracias por seguir en esta historia, no se olviden de dejar su voto ⭐️

So it goes// Kai ParkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora