𝑳𝒊𝒕𝒕𝒍𝒆 𝑩𝒐𝒚 || 𝑮𝒆𝒎𝒆𝒍𝒐𝒔 𝑺𝒕𝒚𝒍𝒆𝒔 𝑿 𝑳𝒐𝒖𝒊𝒔

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐭𝐫𝐞𝐬

Edward:

En los últimos minutos antes de que Harry llegara descubrí varias cosas sobre Louis, Tales como que:

~Tiene 19 años. (Cosa que se me hizo extraño ya que parece de 16)

~Va en la universidad. Justo como debe ser.

~Le encantan los mariscos.

~Tiene un mejor amigo.

~Trabaja. Y se que no me incumbe, pero no debería.

~Vive con su madre porque su hermana y padre se mudaron del país.

—¿Se mudaron de país?—Pregunte frunciendo el ceño.

—Si—Contesto él—, cuando vivíamos en Londres mi papá dijo que vendríamos acá a conocer a mamá— ¿Conocer a mamá? — y luego de que cumplí los 9 él solo se fue y me dejo una nota diciendo adiós y que lo sentía mucho... Es que viví con papá desde niño y mamá se vino a vivir acá cuando yo tenia 1 año.

Pero... ¿De que va esto?

Al ver su semblante perdido quise abrazarlo, pero no quiero ser irrespetuoso con su espacio personal. 

Me levante de mi asiento y me senté en el mueble junto a él, lo tomé de las manos con una mueca triste poco visible y suspire. Es muy dócil... y suave... Es como un bebé.

—Dulzura... No quiero sonar imprudente—Dije y subió la mirada confundido— Pero puedes soltarlo si quieres, recién nos conocemos, así que se quedará entre nosotros.

Continué mirando sus ojos y poco a poco vi como estos se veían mas cansados... Mas aguados.. Gritando en silencio.

Lo halé lentamente de sus manos para levantarlo. Veo que es un tema sensible para él.

Cuando quedo parado frente a mi ya se encontraba sollozando, así que lo tomé de la cintura pidiendo permiso para sentarlo en mi regazo y él no se negó.

Cuando lo abracé estaba en shock, llora con desanimo. Esta cansado y su cuerpo esta totalmente suelto, cediéndome todo su peso, su rostro esta completamente en mi cuello llenándolo de lagrimas.

Lo abracé y bese su frente suavemente mientras le susurraba que podía confiar en mi y que todo estaría bien.

Lo arrullé y... Aunque se que esta pasando un mal momento.. me gusta la sensación que provoca en mi abrazarlo contra mi pecho, tal como si me perteneciera... Como si fuera totalmente mío.

—Todo estará bien, cariño. Yo estoy contigo ¿ok?— El asintió y siguió sollozando débilmente.

Luego de unos 2 minutos de arrullarlo de lado a lado, vi que sus ojos empezaban a cerrarse. El se aferró a mi camisa como si temiese que lo soltara y calmo un poco su respiración.

—No te puedes dormir, Louis.— Susurré apartándole el cabello de los ojos. El hizo un leve puchero y suspiró abriéndolos.—Tienes que comer.

El sonido de la puerta siendo suavemente abierta hizo que el ojiazul entrara un poco en pánico y quisiese levantarse, pero yo lo tomé de la cintura y lo mantuve en mi regazo.