¡Transmigre a "The untamed"! {Slahs Crepúsculo-The untamed)

Cap.2| ¡¿WEN CHAO?!

«UNCANNY:

Una experiencia sobrenatural o inexplicable, extraña o más allá de lo ordinario.»

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- Joven maestro

Oscuridad.

Todo estaba oscuro y frío, muy frío. Su cuerpo se sentía entumecido y ligeros susurros se filtraban en sus oídos impidiendo su descanso.

Se supone que había muerto, entonces ¿Porqué estaba sintiendo emociones tan vividas? ¿O es que había llegado a alguna especie de infierno y sería atormentado por toda la eternidad por demonios sedientos de sangre?

Ah, en realidad no hablaba encerio cuando dijo que para creer en el infierno tenía que verlo primero.

"¿Qué tonterías estoy pensando? creo que me golpeé muy fuerte con el lavabo y ahora estoy delirando. ¿ Joder, siquiera puede un muerto delirar?"

Una mezcla de fuertes y dulces olores le golpeó haciéndolo arrugar la nariz con desagrado...

Horrible.

- Joven maestro... Joven maestro Wen

- Wen Chao

- Creo que está muerto.

- No digas tonterías, si se muere el imbécil estamos todos muertos.

- Pero ¿Por qué? Nosotros no lo matamos, él solito se lo buscó.

- ¡Cállate o te romperé las piernas!

- Amor despierta por favor, no me dejes

- Alguien revise a ver si está respirando, su cara se ve algo...mal.

- Se golpeó con esa cosa, como quieres que se vea, además ya estaba así antes, no cambio mucho.

- Cállense ¿si? Estamos tratando de evitar nuestra muerte aquí.

"Joder, que frío y quién demonios habla tanto no pueden simplemente callarse y ya. Ni muerto puede uno descansar a gusto"

Con razón la gente no quiere morir, es una sensación horrible.

- Maldición, huele horrible, creo que ya se echó a perder.

- Es el agua del estanque idiota.

- Joven maestro - esa voz otra vez, ¿quién demonios era? ¿Por qué simplemente no se calla? - joven maestro despierte - abrió los ojos fastidiado dispuesto a mandar a la mierda a quién sea, pero un fuerte dolor de cabeza le obligó a cerrarlos otra vez. Respiró profundo e intentó relajarse para intentarlo de nuevo, pero los murmullos no ayudaban a que mermara el dolor.

Cuando se hubo calmado lo intentó de nuevo, abrió los ojos y enfocó lo que había frente a él.

Oh

Oh mierda

Oh santa y jodida mierda

- Finalmente despierta, Joven Maestro ¿se encuentra bien? - el extraño chico frente a él le miraba con indiferencia, registrando con sus oscuros ojos su rostro quizás buscando algún daño, aunque no lo hacía con mucho interés que digamos, más bien parecía que estaba siguiendo una orden muy en contra de su voluntad - ¿Joven maestro? - volvió a insistir el desconocido, llamándole por ese extraño título que le sonaba de algún lado, pero no importaba ahora, nada importaba, no cuando tenía semejante hermosa criatura de Dios delante de sus ojos.