Capitulo 34

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Siento un poco de dolor en mí estómago y me despierto de golpe. Miranda está a mi lado y tiene una mano apoyada en mi estómago, la quito con cuidado para no despertarla y me levanto.

Mientras me pongo los lentes miro la hora; 6:30am
Hoy es sábado, solo espero que no haya demasiada gente en la cascada. ¿A que hora nos iremos? Ni si quiera lo sé, al parecer ayer me quede dormida.

Me posiciono delante del espejo y recojo mi cabello en una coleta y me dirijo a la cocina.

-Hola- dice Angie detrás mío
-Buenos días-respondo- ¿A qué hora nos iremos a la cascada?
-A las 7:30am nos recoge la buseta- responde mientras bajamos las escaleras.

La miro confundida y ella lo nota.

-Sí, es que tu madre no quería que todos fueran por su cuenta, así que alquilo una buseta- explica
-Bien...- respondo y camino hacia la cocina

Me paro en seco al ver a Alex y Erick acostados en el sofá (cada uno en un sofá diferente, claro)

-Tu madre los hizo volver para no tener que esperarlos para ir a la cascada- explica Angie- ¿Guapos no?

Los observo unos segundos y miro a Angie, que esta embobada mirándolos.
Me doy la vuelta y me dirijo ahora al refrigerador. Saco un envase de jugo de naranja y me sirvo un poco en un vaso transparente.

-Rachell- dice Miranda entrando a la cocina- tu cama es muy, muy suave.
-Lo sé- digo sonriendo- ¿Quieres un poco?- pregunto ofreciéndole jugo de naranja.

Ella asiente y yo busco otro vaso para servirle.

-¿Tu eres?- pregunta Angie
-Miranda-responde- Amiga de Rachell.
-¿Amiga?- dice sorprendida- Eso debe ser un milagro...

Miranda se limita a rodar los ojos, mientras yo le doy el vaso con jugo de naranja.

-Oye ''Rai'', ¿no me prestas ropa?-pregunta tomando un sorbo de jugo- Ya sabes, es que no quiero ir a mi casa.
-Vamos, eso ni se pregunta- sonrió y ella me devuelve la sonrisa.

Luego de terminar de tomar el jugo de naranja subimos a mi recamara nuevamente.

-¿Te bañas primero?-pregunto
-Bien- sonríe y se dirige a mi armario- Vaya Rachell, y dices que no tienes ropa.

Niego con la cabeza y ella toma un puñado de ropa para tirarla a mi cama.

-¿No?- dice alzando una ceja
-Bueno, si- admito- Escoge.
-Bien...- dice y busca entre el puñado de ropa- ¡Esto!- dice y me enseña una blusa rosa pastel con un estampado de lunas y un short de mezclilla.
-Está bien- sonrío.

Ella asiente y entra al baño.
Busco entre la ropa que saco Miranda que ponerme; encuentro una blusa negra y un short con tirantes color claro.

Escucho que tocan la puerta y abro.

-Hola...- saluda Alex
-Hola- respondo lo más seria posible.
-¿Estas enojada?
-No lo sé- digo encogiéndome de hombros- dime que esos moretones no son porque te peleaste con Erick.

El frunce lo labios y mira el suelo.

-¿En serio Alex?- agrego- ¡¿Por qué?!
-Rachell... es una historia muy larga y... -dice y lo interrumpo.
-Tengo mucho tiempo.

El me mira y por unos segundo pienso quitar la mirada, pero no lo hago.

-¡Rachell!- grita Miranda- ¡Pásame una toalla!
-Te lo explicare luego- dice Alex y se marcha.

Cierro la puerta y busco una toalla para Miranda.

-Toma- digo abriendo un poco la puerta del baño.
-Gracias- responde

Me acuesto boca abajo en la cama y me pongo a pensar: ¿Tanto les cuesta decirme porque diablos se pelearon? O ¿explicarme esa ''historia tan larga''?

-Vas tu- dice Miranda mientras sale del baño.

Recojo la ropa y entro a la ducha.
Siento el agua caer sobre mi espalda y brazos mientras cuido la herida y por un momento me relajo. Luego de unos minutos salgo de la ducha y me visto.
Observo a Miranda peinándose el cabello y sonrío.

-Al menos hoy podrás usar tu cabello al natural- digo
-Sí, ajá- responde sin ánimo.

Le saco la lengua divertida y me dirijo a peinarme también.

-¿A qué venia Alex?- pregunta mirando la puntas de su cabello.
-Me pregunto si estaba enojada- murmuro
-¿Y?...
-Le pregunte que si se había peleado con Erick, ya que quería que me lo confesara, pero no lo hizo.
-¿En serio?- dice mirándome- Vaya, que hermanito tan tonto, ¿Por qué no se lo preguntas a Erick?

No respondo y miro mi imagen en el espejo, en realidad es una buena idea.

-¡Rachell!- grita mi madre- ¡Ya nos vamos, apúrate!

Miro a Miranda y las dos sonreímos al mismo tiempo.

-¡Cascada Multnomah!- grita
-¡Cascada Multnomah!- respondo también.

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Pd: la imagen de multimedia muestra los atuendos de ellas.

Comenzar de nuevo♡Where stories live. Discover now