Asexual Boy [TCF]

Capítulo diecinueve

--Maldito idiota --Murmuró con fastidio leyendo los mensajes que le había dejado Bud, completamente resignado al haber perdido por las circunstancias y no por haber sido derrotado limpiamente.

Sus hijos lo habían llamado asustados, diciendo que habían tenido pesadillas de que volvía a tener un accidente camino a casa, por lo que le habían pedido que por favor volviera a casa pronto porque estaban angustiados.

Naturalmente, Cale no tuvo de otra que retirarse y perder por abandono que por estar borracho. No le gustaba la idea de tener que seguir soportando al idiota de Bud, pero ahora no tenía de otra. 

Volvió a dejar su celular sobre el escritorio. Esperando pacientemente su desayuno para comenzar su día, ignorando claramente que eran las diez de la mañana y en menos de dos horas tendría visitas.

A pesar de saber que debía prepararse para recibir al heredero de los Crossman para entregar los informes sobre el intento de sabotaje. Como los Crossman eran los distribuidores principales de Seúl de cualquier producto de las alacenas de todas las tiendas del distrito, era a ellos con quienes se debía informar sobre este tipo de asuntos.

Pero como estuvo haciendo trabajo desde el hospital, más sus estudios universitarios, era la primera vez que se reuniría con uno de ellos.

También era consciente que la persona con la que se encontrara era Alberu Crossman, el chico que lo había acosado en pleno pasillo por haberlo confundido con ese chico Barrow. 

Era demasiado agotador tener que lidiar con estas cosas, pero era el vicepresidente hasta que terminara sus estudios y pudiera mandar a volar esas responsabilidades. Como la paga no era poca, todo lo que ahorraba vendría muy bien para su vida de vago en el campo con sus hijos.

Sonrió ligeramente ante ese pensamiento. Desde antes de su accidente había decidido irse a vivir al campo con sus mejores amigos, pero después de su muerte, estos les había hecho prometer que al menos él si viviría en el campo, con su familia. 

Era una pequeña promesa que mantenía viva, y que cumpliría a toda costa.

--Cale-nim --Levantó su vista hacia Choi Han, estaba entrando con algo de incomodidad, Cale frunció el ceño ante ese gesto-- Tiene visitas --Mencionó en respuesta a la mirada de Cale-- Y es de Bud.

No pudo contener más su suspiro de cansancio y fastidio. 

"Ese idiota realmente es molesto" Pensó por sus adentros.

--Dile que se vaya.

"Ya tengo suficientes cosas molestas de las que encargarme como para sumar otra más" Pensó con molestia. Choi Han asintió ante la orden, sin perder más tiempo se retiró al mismo tiempo que Ron ingresaba con su desayuno.

--Parece que hay algunos conejos merodeando por la casa, joven maestro.

Cale sintió escalofríos ante la manera tan cruel de pronunciar "conejos".

"Ignoremoslo" Pensó por sus adentros con malestar.

--¿Lo niños están jugando bien? --Preguntó antes de tomar la limonada cotidiana que tanto odiaba.

--Así es, joven maestro. Ellos se encuentran jugando con Lock y sus hermanos --Respondió con una sonrisa benigna que le generó más escalofríos a Cale.

--Bien --Terminó la limonada de un trago más, siendo el ácido sabor del limón bajar por su garganta con amargura-- ¿Nos ha notificado de algo extraño en los últimos días Park Jung Tae?

--No, joven maestro, no he recibido ningún informe de parte del encargado Park Jung Tae, así como tampoco ha recibido correspondencia todavía.

--Bien. Ya puedes irte.

--Si, joven maestro.

Ron se retiró sin hacer el más mínimo ruido inquietando como siempre a Cale, que sólo pudo suspirar ante la incomodidad que le generaba, pero no tenía de otra que resignarse.

--¿Usted quién es? --Preguntó On curiosa, con sus dos hermanos detrás de ella. Hans había dejado en la sala de espera al chico de cabellos extraños, y hasta ahora se habían animado a hablarle, sobretodo al ver que el chico notaba sus presencias y los incitaba a entrar a la habitación con él.

Tanto Raon como On estaban maravillados con el extraño cabello azul que portaba el chico, pero estaban siendo muy cautelosos también. Algo que claramente notó Bud, pero eso no quitó su gran sonrisa.

--Soy amigo de su padre --Mencionó con una gran sonrisa, cosa que extrañó a los menores-- Me llamo Bud illis, encantado de conocerlos pequeños --Extendió su mano y se agachó para estar a su altura. 

Bud no les trasmitía una mala sensación, y su actitud carismática les llamaba bastante la atención, sobretodo cuando en la casa, la gran mayoría de los adultos que vivían ahí eran de personalidad fría y casi distante.

--Yo soy On --Tomó su mano para estrechar la mano del mayor frente a ella, si estaban dentro de la casa era imposible que les pasara algo, y si realmente era un amigo de su padre, entonces era mejor llevarse bien con él. Cale no tenía más amigos además de Choi Han, no después de aquel accidente.

--Yo soy Hong --Murmuró asomando su cabeza de detrás de su hermana.

--Y yo Raon Miru --Murmuró sonrojado, sin despegar su vista del cabello azulado del mayor.

Bud claramente notó como observaban su cabello.

--¿Quieren tocar mi cabello? --Preguntó con una sonrisa divertida. Los dos menores detrás de On se volvieron a esconder tímidos, pero él podía ver sus cabezas aún, y el cómo asintieron-- Entonces tóquenlo.

Bajó su cabeza con tranquilidad, aún estando agachado, y esperó paciente el que los menores tocaran su excéntrico cabello. Era algo que normal que lo observaran raro por tan peculiar color de cabello, que siempre defendería a muerte como natural, aunque claramente no lo pareciera.

Esperó unos momentos antes de sentir dos pequeñas manos tocar con muy miedo sus cortos mechones de pelo, eso le generó ternura, tenía mucha debilidad con los niños.

--Tiene un color de pelo muy peculiar --Mencionó On con mucha intriga, pero sin tocar los mechones azulados del contrario.

--Pero es cien por ciento natural, de eso lo puedo asegurar --Bud volvió a levantar la cabeza con una gran sonrisa al notar que los menores habían dejado de tocar su cabello.

--¡Es único! --Agregó Hong con emoción. Bud le transmitía mucha confianza, y eso le hacía sentirse cómodo.

--¡Exactamente! --Respondió con una gran sonrisa Bud, haciendo sonreír a Raon y a Hong.

--¿A qué vino, señor Bud? --Preguntó más relajada On, cosa que Bud notó.

--Vine a visitar a su padre, pero no me digan señor, sólo llámenme Bud, no me hagan sentir viejo chicos --Pidió con diversión, On asintió, al igual que Raon y Hong.

--¿Quiere que lo llevemos con nuestro padre? --Preguntó Hong ahora, al lado de su hermana, más tranquilo y sonriente.

--Sería genial si pudieran pequeños.

--Entonces vamos --Raon y Hong tomaron cada uno una mano de Bud, comenzando a arrastrarlo hacia el comedor donde seguramente estaría desayunando Cale.

Bud comenzó a reírse por el animo que presentaban los pequeños, realmente tenía un don para hacer sentir cómodos a los niños.

--Entonces ustedes serán mis guías pequeños, estoy a su cuidado --Comentó alegre, On suspiraba mientras negaba con una sonrisa, pero se sentía cómoda con su presencia también, por lo que siguió a los tres chicos desde su espalda, prestando atención a que no pasara nada.

Su padre había conocido a un amigo realmente único.